La Copa Mundial de Fútbol se inició en 1930, siendo Uruguay el primer campeón. El trofeo original creado fue llamado “Victoria”, pero en 1946, se rebautizó como “trofeo Jules Rimet” en honor del entonces presidente de la FIFA, hasta 1970. El Trofeo Jules Rimet estaba hecho de plata esterlina enchapada en oro y lapislázuli, representando a Nike, la diosa griega de la victoria.

El nuevo trofeo hecho en 1974, luego de que Brasil se quedara permanentemente con el trofeo anterior por derecho al ganar en 1970 el Mundial por tercera vez, fue confeccionado en oro de 18 quilates con base de malaquita, representando a dos figuras humanas sosteniendo el planeta Tierra.

Para proteger de los nazis el “trofeo Jules Rimet” durante la Segunda Guerra Mundial, el vicepresidente italiano de la FIFA y presidente de la Federación Italiana de Fútbol, Ottorino Barasssi, sacó en secreto el trofeo de un banco en Roma donde reposaba por ser Italia la ganadora del Mundial de 1938, y lo escondió dentro de una caja de zapatos debajo de su cama hasta el regreso de la Copa Mundial de la FIFA en 1950, en Brasil.

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A finales de 1965 y a cuatro meses de iniciarse el Mundial, el 20 de marzo de 1966, el trofeo Jules Rimet fue robado de una exhibición en Westmister, Inglaterra, exigiendo un rescate de 15,000 libras esterlinas para su devolución. El ladrón fue engañado con billetes falsos y capturado, pero el trofeo no apareció. Una semana después, fue encontrado envuelto en periódicos en un jardín en los suburbios de Londres, por “Pickles», un perro raza collie, cuyo dueño, David Corbett, lo saco y lo llevó a una estación de policía. A consecuencia, se fabricó una réplica en secreto y se utilizó hasta 1970.

En 1983 fue robado de nuevo en Río de Janeiro, Brasil y se dice que fue fundido. En enero del 2015 la base original fue encontrada en un sótano de la FIFA en Zurich, Suiza.