ZURICH, Suiza. Tras aprobar reformas destinadas a erradicar la corrupción en la FIFA, 207 mandatarios de las 209 federaciones afiliadas encararon el viernes la votación de la que saldrá el próximo presidente del organismo rector del fútbol mundial. Una vez votadas las enmiendas estatutarias y tras una pausa de una hora, el proceso electoral arrancó con los discursos de los cinco candidatos a suceder a Joseph Blatter.
El jeque Salman se antoja el máximo favorito para lograr el cargo, al que también opta el actual secretario general de la UEFA, Gianni Infantino, además del príncipe Ali de Jordania, el francés Jérôme Champagne y el sudafricano Tokyo Sexwale. Los tres los últimos apenas tienen opciones de victoria. Kuwait e Indonesia no pueden votar debido a la interferencia de sus gobiernos en las federaciones, lo que deja un total de 207 papeletas entre las 209 federaciones afiliadas.
Para imponerse en primera ronda se precisa una mayoría de dos tercios de la asamblea, es decir, 138 votos. De no conseguirse, en un segundo intento se necesita una mayoría simple sobre el 50% — 104 apoyos. El candidato menos votado será eliminado en las rondas subsiguientes. El apoyo de la mayoría de naciones en África y Asia deberían bastar para impulsar el triunfo de Salman.
Funcionarios de la FIFA, delegados y observadores dijeron el jueves a The Associated Press que las encuestas entre votantes y confederaciones indicaban que Salman era el candidato que congrega más apoyos, y podría lograr la mayoría en la primera votación. Con todo, seguramente será necesaria una segunda vuelta si no renuncian los otro cuatro candidatos.