Seúl. EFE.
Un tribunal de Seúl aprobó ayer la solicitud de un equipo conjunto de investigación para detener al presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, por su breve imposición de la ley marcial, convirtiéndose en el primer presidente surcoreano en ejercicio en enfrentar un arresto.
El Tribunal del Distrito Occidental de Seúl emitió la orden contra Yoon acusado de planear la fallida declaración de ley marcial del 3 de diciembre, orquestar la insurrección y abusar de su poder, y después de que el mandatario haya ignorado tres citaciones para ser interrogado al respecto.
Tras la orden judicial, la Oficina para las Investigaciones de Corrupción de Funcionarios de Alto Rango (CIO por sus siglas en inglés) cuenta ahora con 48 horas para detener a Yoon para interrogarlo.