El Banco Central de la República Dominicana (BCRD), en su reunión de política monetaria del mes de septiembre de 2021, decidió mantener su tasa de interés de política monetaria en 3.00 % anual. De este modo, la tasa de la facilidad permanente de expansión de liquidez (Repos a 1 día) permanece en 3.50 % anual y la tasa de depósitos remunerados (Overnight) en 2.50 % anual.
La decisión sobre la tasa de referencia se basa en el análisis exhaustivo del impacto del COVID-19 sobre la actividad económica y la evolución futura de la inflación. En particular, la variación mensual del índice de precios al consumidor (IPC) en agosto fue de 0.80 %, mientras que la inflación acumulada durante los primeros ocho meses de 2021 fue de 5.41 %. De este modo, la inflación interanual ha disminuido desde su máximo alcanzado en mayo del 2021 de 10.48 % a 7.90 % en agosto. Por otro lado, la inflación subyacente, que excluye los componentes más volátiles de la canasta, alcanzó 5.91% interanual en agosto 2021.
No obstante la moderación en los últimos meses, la dinámica inflacionaria continúa afectada por choques transitorios de oferta asociados a mayores precios del petróleo y de otras materias primas, así como al incremento de costos globales de fletes. Adicionalmente, en el mes de agosto, los precios de ciertos productos agropecuarios se han incrementado en términos mensuales, como consecuencia de factores coyunturales asociados a la producción cárnica que han incidido sobre su precio en el mercado local, lo cual ha moderado la tendencia a la baja en la inflación interanual.
Si bien el sistema de pronósticos del BCRD indica que la inflación continuaría su convergencia al rango meta de 4 % ± 1 % durante el horizonte de política monetaria, este proceso sería más gradual de lo previsto originalmente debido a la mayor persistencia de los choques externos. Ante esta situación, y en la medida que la economía consolida su recuperación, el Banco Central ha iniciado desde el mes de agosto del presente año el retorno gradual y ordenado de los recursos otorgados durante la pandemia, gestionando activamente los niveles de liquidez de la economía, con el propósito de preservar la estabilidad de precios en un contexto de fuertes fundamentos macroeconómicos.
En el entorno internacional, si bien las perspectivas económicas se mantienen positivas, se observa una moderación en las expectativas de recuperación global asociada al elevado ritmo de contagios mundiales de COVID-19 y a las distorsiones en las cadenas de suministros globales. En ese sentido, Consensus Forecasts prevé una expansión para la economía mundial de 5.7 % en 2021.
Para Estados Unidos de América (EUA), nuestro principal socio comercial, las proyecciones más recientes de Consensus apuntan a un crecimiento de 5.9 % para 2021, revisándose ligeramente a la baja por tercer mes consecutivo debido a la incertidumbre causada por una mayor propagación del COVID-19. Durante el segundo trimestre del año 2021, la economía estadounidense se expandió en 12.2 % interanual, mientras la inflación alcanzó 5.3 % en agosto. En este contexto, la Reserva Federal mantiene la tasa de fondos federales en el rango de 0.0 % y 0.25 % anual, pero ha anunciado que en los próximos meses podría iniciar de forma gradual el retiro del estímulo monetario a través de un desmonte paulatino de los programas de inyección de liquidez que ha implementado por medio de la compra de bonos del tesoro y títulos respaldados por hipotecas.
Por otro lado, las previsiones para la actividad económica en la Zona Euro han mejorado, proyectándose para 2021 una expansión de 5.0 %. En tanto, el Banco Central Europeo ha mantenido la tasa de depósitos overnight en -0.50 % anual, mientras que anunció que moderaría el ritmo del programa de emergencia de compra de activos financieros por la pandemia, aunque continuaría con el resto de los programas de provisión de liquidez y de operaciones de refinanciamiento de largo plazo para el sector privado.
Las perspectivas para América Latina continúan presentando avances, previéndose una expansión de 6.2 % en 2021, según Consensus, condicionadas por la evolución de las tensiones socio-políticas en varias economías de la región. En este contexto, muchos de los bancos centrales mantienen posturas expansivas, aunque algunas de las economías más grandes, como Brasil, Chile, Colombia, México y Perú, han aumentado sus tasas de interés de referencia, en atención a factores domésticos relacionados con presiones inflacionarias y cambiarias, además de un fuerte impulso de la política fiscal.
Con relación a las materias primas, el precio del barril del petróleo intermedio de Texas (WTI) se situó en torno a US$71 dólares en promedio durante septiembre, superior al promedio del mes anterior de US$68 por barril, debido a restricciones coyunturales por el lado de la oferta. Sin embargo, los organismos especializados esperan que los precios del crudo se moderen durante los próximos trimestres en la medida que se vaya normalizando la producción mundial. Por otro lado, el precio promedio del oro se ubicó alrededor de US$1,800 por onza troy en septiembre, al ser utilizado como refugio de valor en un contexto de incertidumbre, lo que beneficia a nuestro país a través de las exportaciones de este metal.
En el entorno doméstico, el proceso de recuperación de la demanda agregada se ha afianzado, destacándose el crecimiento del Indicador Mensual de Actividad Económica de 11.7 % interanual durante el mes de agosto. Este dinamismo de la economía dominicana ha permitido que la expansión acumulada durante los primeros ocho meses del año se ubique en 13.0 %, influenciada por el buen desempeño de sectores con un alto encadenamiento productivo como Construcción, Manufactura Local, Zonas Francas, Comercio, entre otros.
En este contexto, las proyecciones de crecimiento económico apuntan a una expansión que alcanzaría 10% o más durante este año 2021. Estas perspectivas positivas para la economía dominicana están apoyadas en la mejoría gradual del turismo y los avances en el plan nacional de vacunación, que ha logrado inocular aproximadamente el 70 % de la población adulta con una dosis y superando el 57% con dos dosis, una de las tasas de vacunación más altas de la región.
Asimismo, el esfuerzo coordinado de las políticas monetaria y fiscal ha contribuido a consolidar la reactivación de la demanda interna. La implementación del paquete de estímulo monetario ha sido exitosa, contribuyendo a mantener elevados niveles de liquidez en el sistema financiero, propiciando una reducción sustancial de las tasas de interés de unos 400 puntos básicos y un mayor dinamismo del crédito privado en moneda nacional que mantiene una expansión superior al 9 % interanual.
Tomando en consideración los avances en el proceso de la recuperación económica y las condiciones monetarias favorables, el Banco Central ha iniciado un plan ordenado de normalización monetaria mediante el retorno gradual de los recursos otorgados a través de las distintas facilidades de liquidez, en la medida que se vayan amortizando los préstamos concedidos por medio de estos instrumentos. De esta forma, el ente emisor ha recuperado unos RD$45 mil millones a la fecha y se estima que este monto podría superar los RD$60 mil millones para el cierre del año 2021.
En el sector externo, continúa el buen desempeño de las remesas que crecieron 38.6 % durante enero-agosto 2021 y se estima que superarían los US$10 mil millones para el cierre del presente año; mientras que el turismo se recupera gradualmente al recibir durante agosto de 2021 aproximadamente el 96 % de los pasajeros no residentes que arribaron durante el mismo mes de 2019, previo a la pandemia. Asimismo, se mantiene el dinamismo de las exportaciones tanto nacionales como zonas francas, al crecer 21.2 % y 26.7 % interanual durante el período enero-agosto 2021, respectivamente. En tanto, los flujos de Inversión Extranjera Directa continúan elevados y se ubicarían en torno a los US$3 mil millones para el cierre del año.
Los niveles de reservas internacionales se mantienen en niveles históricamente altos, en torno a US$ 12,800 millones al cierre de septiembre, equivalentes a 7.4 meses de importaciones y 14% del PIB, lo cual supera las métricas recomendadas por el Fondo Monetario Internacional. Esta posición fuerte de reservas y la mejoría en el flujo de divisas han contribuido a mantener la estabilidad relativa del tipo de cambio, reflejada en una ausencia de presiones cambiarias durante el presente año.
El Banco Central de la República Dominicana reafirma su compromiso de conducir la política monetaria hacia el logro de su meta de inflación y el buen funcionamiento de los sistemas financiero y de pagos. En ese sentido, se mantendrá dando especial seguimiento al impacto de la pandemia del COVID-19 y la evolución de las presiones inflacionarias, encontrándose preparado para adoptar las medidas necesarias ante factores que puedan poner en riesgo el objetivo de inflación y afectar la estabilidad macroeconómica.