Desde la perspectiva de la alianza público-privada que promueve el Gobierno podría valorarse positivamente que se ponga en manos de las clínicas privadas RD$2,000 millones para la construcción o remodelación de infraestructuras, financiados a través del estatal Banco Nacional de las Exportaciones (Bandex) a tasas de interés privilegiadas de un 6.5% en pesos, y 5.5% en dólares, y con períodos de gracia especiales.

Sin embargo, esa flexibilidad con el sistema de salud privado le abre las compuertas al rechazo social, porque esos establecimientos son los mismos que violan los derechos de los usuarios cuando les exigen adelantos de pago para determinadas atenciones en casos de emergencia, no importa que el paciente esté a punto de perder la vida.

Desde esos centros se genera la mayor cantidad de quejas por el elevado costo de los procedimientos, cirugías de alta complejidad, análisis de laboratorios, consultas, estudios de imagen, ingresos y egresos, y por la negación de atención a pacientes cuando no tienen seguro médico o cuando se comprueba que su cobertura está agotada.

De modo que la sensibilidad del Gobierno hacia esas prestadoras de servicios de salud, a las que reconoce su esfuerzo en los períodos críticos de la pandemia covid-19, y por lo que motiva la apertura de esa cartera de préstamos, no la sienten los pacientes al momento de saldar cuentas.

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Estimado

Se estima que el gasto de bolsillo en salud en los hogares dominicanos ronda un 68% de sus gastos corrientes, lo que representa una enorme carga, aun mayor cuando se presentan enfermedades catastróficas, cuyos tratamientos son prolongados y de muy alto costo.

A través del denominado Fondo Avance Salud Bandex se pretende financiar la construcción de centros de salud del tercer nivel, así como su expansión y modernización en materia tecnológica.

Los centros de tercer nivel son las grandes clínicas que se especializan en atención de alta complejidad, aunque también ofrecen servicios de atención primaria.

“Queremos impulsar este fondo de más de dos mil millones de pesos para potenciar, entre otras cosas, clínicas y centros médicos de tercer nivel, laboratorios, producción farmacéutica nacional y de exportación, o proyectos de turismo de salud”, expresó el presidente Luis Abinader al anunciar la medida a favor de los propietarios de centros de salud.

La decisión sugiere un tipo de gobernanza dirigida hacia todos los sectores productivos, pero genera interrogantes sobre su pertinencia, tomando en cuenta que la prioridad del Gobierno debe estar encaminada hacia la mejora del sistema sanitario público.