La nativa de San Pedro de Macorís ha representado al país en tres ediciones de los Juegos Olímpicos y su historial de éxitos se inició cuando apenas tenía 14 años de edad en el Mundial Juvenil
El orgullo de representar a su país le proporciona a Beatriz Pirón la fuerza necesaria para superar cualquier obstáculo que se presente en la ruta.
Ni siquiera el convertirse en madre por tercera vez la motivó a desoir el “llamado de la patria” y pese a que tan solo habían transcurrido cuatro meses desde el nacimiento de Juan Manuel, Pirón viajó a Tokio para representar a su país en los Juegos Olímpicos.
“Para Tokio solo entrené 49 días, porque recientemente había dado a luz de mi tercer hijo, pero sentía la necesitad de representar a mi país, una vez más, y lo hice, con mucho orgullo”, revela.
“Dios me dio las fuerzas para competir en los Juegos de Tokio”, dice la pesista dominicana, en cuyo historial figuran tres participaciones en los Juegos Olímpicos.
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A pesar del corto tiempo empleado para su preparación, Pirón terminó en el octavo puesto en la categoría de 49 kilos y fue la segunda mejor del grupo B, hazaña que logró tras alzar un total de 176 kilogramos.
La nativa de San Pedro de Macorís también recibió un diploma, firmado por el Comité Olímpico Internacional, que certifica la buena actuación de la criolla.
Ser madre y atleta
La campeonato panamericana y centroamericana y del Caribe es madre de Yamirka Elizabeth, Berlyn y Juan Manuel, este último de solo un año. Reconoce que ser madre y atleta al mismo tiempo es una tarea muy difícil.
“Y a todo ello se suman otros elementos, que implican grandes sacrificios, porque no solo ser madre y atleta, también es ser esposa y estudiante”, agrega Beatriz.
Resalta, sin embargo, que está muy agradecida por todo lo que ha recibido de Dios y la oportunidad de representar con dignidad a su país.
Carrera cargada de éxitos
La petromacorisana ha desarrollado una carrera cargada de triunfos, desde que se inició en las pesas a muy temprana edad.
Con solo 16 años, ganó la medalla de bronce en arranque del Campeonato Mundial Juvenil del 2011 y ese mismo año se adjudicó tres medallas de oro en el Panamericano.
Desde entonces, la dominicana no ha dejado de obtener triunfos para República Dominicana. Terminó séptima en arranque en los Juegos Olímpicos Londres 2012 y cuarta en Río 2016. Ganó la primera medalla de oro para República Dominicana en los Juegos Panamericanos Lima 2019.
Familia de pesistas
Es sobrina de Guillermina Candelario, tres veces medallista panamericana e inmortal del deporte dominicano.
“Guillermina fue mi inspiración para que incursionara en este deporte, levantamiento de pesas”, confiesa.
Agrega que de su tía siempre ha recibido los mejores consejos.
“Me dice que siempre debo estar positiva, no importa lo que ocurra”, dice Beatriz. Agrega que de su madre, Milquella, hermana de Guillermina, también ha recibido orientaciones inolvidables y que le han sido de mucha utilidad. “Mi madre me pide que nunca me rinda, que confíe en Dios, que todo lo puede”.
Una garantía de medallas
Beatriz Pirón nació en San Pedro de Macorís en 1995 y a pesar de su corta edad, en 2009 participa en el Mundial Juvenil de Halterofilia celebrado en Chiang Mai, Tailandia, ocupando la primera posición. Ahí comienza una carrera llena de lauros. En 2011, Pirón ganó tres medallas de oro en el Campeonato Panamericano Juvenil, en Perú, con dos récords continentales.