El presidente Joe Biden prometió el martes que la primera iniciativa que enviará al Capitolio el próximo año será una que establezca como ley las protecciones al aborto —siempre que los demócratas consigan los escaños suficientes en el Congreso para aprobarla—, palabras con las que intenta alentar a los votantes de su partido a tan sólo tres semanas de que se celebren las elecciones de mitad de mandato.
En dos ocasiones, Biden le pidió a la ciudadanía que recordara la manera como se sintió a finales de junio, cuando la Corte Suprema revirtió el histórico fallo de Roe vs. Wade que legalizó la interrupción del embarazo en 1973, lo que muestra que la Casa Blanca trata de asegurarse de que el tema se mantenga fresco en la mente de los votantes demócratas este año.
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“Quiero recordarnos a todos cómo nos sentimos cuando se revirtieron 50 años de precedente constitucional”, dijo el presidente desde el Teatro Howard. “El enojo, la preocupación, la incredulidad”.
Criticó en repetidas ocasiones a los republicanos de todo el país que han impulsado restricciones a la interrupción del embarazo, a menudo sin excepciones, y les dijo a los demócratas entre el público que “si les importa el derecho a elegir, entonces tienen que votar”.
Tal como lo ha hecho todo el año, Biden enfatizó que únicamente el Congreso puede restaurar por completo el acceso al aborto a como era antes de la decisión de la Corte Suprema en el caso Dobbs vs. Jackson que revirtió Roe. Pero también reconoció que “nos faltan unos cuantos votos” en estos momentos para reinstaurar las protecciones al aborto a nivel federal, llamando a los votantes a enviar a más demócratas al Congreso.
“Si hacemos eso, les hago esta promesa a ustedes y al pueblo estadounidense. La primera iniciativa que enviaré al Congreso será codificar Roe vs. Wade”, declaró Biden. “Y cuando el Congreso la apruebe, la firmaré en enero, 50 años después de que se decidió por primera vez a Roe como ley suprema”.
Es una gran condicionante.
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Para que Biden pueda cumplir su promesa, los demócratas necesitarían conservar el control de la Cámara de Representantes y ganar escaños en el Senado, un escenario poco probable tomando en cuenta la dinámica política actual. Los derechos al aborto han sido un importante factor de motivación para los demócratas este año, aunque la economía y la inflación aún se mantienen como la principal preocupación entre la mayoría de los votantes.