Jóvenes universitarios se lanzan a la realización de cortometrajes, películas y documentales. Al grito de “Luces, cámara y acción”, algunos ya pisan el terreno de la dirección.
Es el caso de Sarah María Valenzuela profesional de comunicación audiovisual y artes cinematográficas y Adelin Berihuete Paulino, egresada de la carrera de comunicación audiovisual y artes cinematográcas, ambas de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), cuya pasión por el cine las unió en el cortometraje “Seré: el agua está destinada a más” sobre el contexto de aguas residuales de nuestro país, del cual fue productora y guionista.
Con esta pieza ganaron el Premio Egeda Dominicana en el marco de la Semana más corta de la PUCMM 2023, premio que las condujo a la tercera edición de Iberseries Platino Industria 2023 celebrado en Madrid, España.
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Sarah María, asegura que su interés por el cine nace de las historias.
“Siempre he valorado la capacidad de este arte de cautivar tu atención por su belleza estética y profundidad temática a la hora de inspirarse en la vida misma. El saber que era posible crear un futuro profesional ligado a esta forma de expresión fue una gran revelación para mí, ya que inicialmente no lo había considerado”.
Lo mismo pasa con Adelin. Asegura que desde pequeña, ha encontrado cierto consuelo en las películas. “Verlas con mi familia siempre ha sido como estar en casa, una experiencia acogedora y compartida. El hecho de poder compartir una narrativa, de saber que hay una audiencia ahí para escuchar, ver y comprender lo que uno piensa o quiere proyectar como director, es algo verdaderamente poderoso”, dice.
El corto que presentaron recoge su preocupación por el medio ambiente.
En ese sentido explicaron que Sinopsis de “Seré: el agua está destinada a más”, muestra el impacto negativo de las aguas residuales sobre la salud humana y el medio ambiente si no se tratan adecuadamente.
Durante la producción de esta pieza audivisual descubrieron que el Gobierno dominicano y diversas organizaciones han estado trabajando con El Pacto Dominicano por el Agua 2021-2036 para mejorar el saneamiento y conservación de las aguas.
“Sin embargo, el problema persiste y se necesita una mayor conciencia tanto pública como gubernamental, así como inversiones en tecnologías y políticas adecuadas para abordar este desafío y garantizar un tratamiento adecuado de las aguas residuales en la República Dominicana”, detalla Adelin.
Al respecto, dice Sarah María, que cortometraje le dedicaron mucha pasión e interés. “Nunca apuntamos a realizarlo para ser premiadas, sino por la satisfacción de un trabajo bien realizado y que concientizara a quienes lo vieran sobre nuestras aguas residuales. Un tema con poco espacio en nuestros medios, pero que debería alarmarnos a todos”.