El abogado Francisco Álvarez Martínez advirtió este viernes que el apresamiento de los implicados por el contrato entre el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT) y la empresa Transcore Latam, relacionado con la semaforización del Gran Santo Domingo, podría transformarse en un espectáculo mediático digno de una novela.

Álvarez, señaló que, aunque los principales actores del caso parecen estar «en el mismo saco», en realidad son adversarios.

«Lo que se va a ver ahora es quizás un show que va a rayar en lo que pudiera ser una novela, porque tenemos actores que aunque estén dentro de un mismo saco son realmente adversarios», expresó.

El abogado también criticó la desinformación que suele rodear este tipo de casos, advirtiendo que se busca generar titulares y viralizar la noticia más que informar con precisión.

«Hay que recordar que hay mucha desinformación… tenemos que manejar siempre ese porcentaje de información que viene teledirigida de un lado y del otro», agregó Álvarez.

En cuanto al desarrollo del proceso, el abogado mencionó que el Ministerio Público podría pedir 18 meses de medidas de coerción para los involucrados, como se ha contemplado en otros casos de este tipo.

¿Hay peligro de fuga?

Sin embargo, aseguró que no considera que exista peligro de fuga, ya que los principales acusados «son personas de notoriedad y no se han escondido».

Sobre los allanamientos realizados, Álvarez enfatizó la importancia de mantener la transparencia en los procedimientos legales, especialmente cuando el abogado del acusado está presente.

«En un escenario donde se está ejecutando un allanamiento y el abogado de la persona está presente, no es que tu le vas a pedir permiso, porque el allanamiento se va hacer con o sin permiso pero si debes mantenerla la línea de comunicación con su representado», afirmó.

«También tienes que darle el acta que se emitió en el Tribunal y evidentemente entregar el acta que se levante luego de que se ejecutó el allanamiento o el arresto», añadió.

Estas declaraciones fueron ofrecidas en el programa «Esto no tiene nombre».