El Gabinete de Salud había anunciado que la jornada de vacunación sería por cita para evitar aglomeraciones, sin embargo, en la apertura de la fase para la inoculación de los adultos mayores de 70 años este tópico fue cumplido.
Muchos envejecientes manifestaron que se enteraron de la jornada a través de medios televisivos, radiales y redes sociales.
En la Universidad Pedro Henríquez Ureña el desorden, la improvisación y el cero distanciamiento físico predominaba desde tempranas horas de la mañana.
Panorama diferente se observó en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), donde había mejor organización. Aunque en la fila de entrada no se cumplía el metro y medio de sana distancia, los mayores registrados pasaban a una área de espera donde sí se cumplían todos los protocolos.
En este puesto de vacunación trabajan cinco vacunados. Este lunes recibieron 480 dosis, aunque eran más los pacientes que esperaban la dosis.
La decana de la facultad de Ciencias de la Salud de la Pucamaima, Mary Anne Butler, indicó que concluida las dosis entregadas podían solicitar más al Ministerio de Salud Pública.
Con este mismo problema se puede enfrentar mañana la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) cuando le toque inocular a los mayores de 70 años con comorbilidades, puesto que la aplicación del antídoto también será por orden de llegada y solo contará con 120 dosis.
Este lunes, el dispensario médico de la UASD vacunó a su personal médico y se prepara para vacunar a los ancianos.