El champán, cava o vino espumoso, es la bebida habitual en la mesa durante la Navidad, e imprescindible en las fiestas para recibir el Año Nuevo. Servido siempre bien frío, es una bebida que se adapta a cualquier momento y la mejor y más glamurosa compañía para muchos de los platos que se consumen durante estos días festivos.
Cuenta la leyenda que el champagne se remonta a 65 millones de años, cuando el norte de Francia y Gran Bretaña estaban cubiertos por el mar.
Y que a medida que el mar fue retrocediendo, fue dejando una enorme cantidad de suelo calcáreo, rico en minerales y fósiles.
De ese legado geológico emergerían eventualmente los viñedos de champagne, donde se producen los vinos espumosos más preciados del mundo y que a través de los años han servido para marcar los momentos más importantes de nuestras vidas: bodas, el nacimiento de un hijo, un nuevo empleo, la llegada de un nuevo año, las tomas de posesión, etc.
Ninguna otra bebida tiene un estatus celebratorio como el champagne, ¡y qué mejor, para cerrar un año marcado por situaciones difíciles y esperar con optimismo el 2010 que con una fría y espumosa copa de champán!
Los mejores
Señalar los más exclusivos y distintivos es sumamente difícil y arriesgado, sin embargo, vamos a hacernos eco de un dicho muy popular entre consumidores de champagne que reza así: James Bond seduce con Bollinger RD
Los famosos de Hollywood celebran con Dom Perignon. Los adinerados prefieren a Krug Le Mesnil. Los sibaritas la Grande Dame. Y los expertos se deleitan con Salón.
Consejos para conservar, enfriar y destapar el champán. Contrario a lo que se cree, el champán -al menos si ha sido elaborado según las reglas del arte- no se ha de consumir forzosamente joven.
Si proviene de un pago clasificado grand cru o premier cru, se trata de un vino para guardar que, envejecido en una bodega a 10ºC, puede alcanzar con los años un bouquet y una profundidad increíble.
La nevera es mal lugar para guardarlo durante mucho tiempo a causa de las vibraciones.
Si un día se le presentan invitados sin avisar y no tiene champán frío, la mejor solución es sumergir la botella en una hielera a la cual habrá añadido junto al hielo sal gruesa para acelerar el proceso.
Zoom
Sutileza
La botella de champán debe destaparse con suavidad. El alambre que protege el salto debe abrirse con cuidado, dele unas seis vueltas, sosteniendo el corcho al quitarlo. Se debe inclinar la botella agarrándola por la base.
Receta
Coctel de champán
1/2 botella de cava o champagne brut
2 melocotones grandes, 1 chorrito de ron blanco, 4 terrones de azúcar
Preparación. Poner los melocotones en una cacerola, cubrirlos con agua y dejar cocer durante 15 minutos. Retirarlos del fuego y pelarlos. Poner al fuego el azúcar con medio vaso de agua. Añadir los melocotones y dejarlos cocer a fuego lento durante diez minutos (pasados ocho minutos, añadir el ron). Para servir, coger dos vasos grandes y vistosos, introducir un melocotón en cada uno de ellos junto con el líquido de la cocción y añadir el cava o el champán muy frío.