Hoy 
Leonardo Antonio Fernández Reyes, el chofer de la Procuraduría General de la República (PGR) asesinado de un balazo durante un asalto en el sector Cienfuegos, en el distrito municipal Santiago Oeste, dejó tres hijos en orfandad.
El hombre de 45 años de edad, conducía su automóvil, un Kia, modelo K5, por la calle 9 del barrio El Semillero, cuando fue interceptado por desaprensivos que se lo llevaron en su vehículo.
Las investigaciones preliminares dan cuenta de que la víctima retornaba a su casa después de haber llevado a una vecina embarazada a un centro de salud.
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Fernández Reyes fue encontrado gravemente herido en una zona apartada y falleció pocas horas después en el Hospital Presidente Estrella Ureña de Santiago.
Tras el hecho, se informó que el Ministerio Público y la Policía Nacional persiguen a los asaltantes que le quitaron la vida a Leonardo Antonio Fernández Reyes, quien estaba asignado a la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC) que laboraba en el Centro de Atención y Privación de Libertad Provisional (Caplip 3), del Palacio de Justicia en Santiago.
El fiscal Osvaldo Bonilla deploró el crimen, al asegurar a los familiares de Fernández Reyes que las autoridades hacen todos los esfuerzos para dar con los responsables del crimen.
