Más de 300 organizaciones sociales se manifestaron ayer frente al Palacio Nacional para exigir del presidente Luis Abinader defender el agua y los demás recursos naturales, contra la minería irresponsable y la construcción de presas que solo buscan favorecer intereses económicos reducidos, no a la colectividad.

Como en los viejos tiempo de la Marcha Verde, con letreros y pancartas en alto los cientos de hombres y mujeres que llegaron hasta la intersección de las avenidas Doctor Delgado y México desde diferentes puntos de la República Dominicana, esta vez para defender el agua, a propósito del Día Mundial del Medio Ambiente, que se conmemora este lunes.

El agua es un derecho humano inalienable y rechazamos cualquier modalidad de privatización. Este derecho está consagrado en la Constitución, no obstante los esfuerzos por darle protagonismo al sector privado lucrativo en el llamado Pacto del Agua y las intenciones de incluir herramientas normativas que abran brechas a la privatización, demanda una alerta general de toda la sociedad.

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Janisa Espinal, en nombre de la Coalición Socio Ambiental en Defensa de la Tierra, leyó el manifiesto amplificado por grandes bocinas.

Manifestó que constituye una violación constitucional, que para favorecer intereses económicos y políticos se afecten los recursos naturales y bienes colectivos de la población de regiones enteras, se conduzca el país a quedarse sin agua, sin agricultura, sin soberanía alimentaria, sin ríos, sin vegetación, sin playas públicas, sin salud, en dos palabras, sin derechos, sin vida. Proponen un modelo socioeconómico basado en la agricultura, la agroindustria, el turismo comunitario, las energías renovables, donde se preserven las fuentes de agua, los empleos productivos, los derechos de la gente, los recursos naturales y el medio ambiente.

Además, que se cancelen de manera definitiva el Proyecto hidroeléctrico Las Placetas en San José de Las Matas y La Sierra, ya que se ha demostrado su inviabilidad.

El cierre de toda posibilidad de que la Gol Qwest explote el oro en Loma Romero, San Juan de la Maguana, tras asegurar que todo el Suroeste sería afectado, la sal sería más cara que el chivo. Por las mismas razones, deténganse las exploraciones de la Uni Gold en Restauración y la Línea Noroeste.

Sugiere que se cancele la operación de las barcazas contaminantes en Playa Los Negro, Puerto Viejo Azua, instaladas con un permiso ambiental amañado. Que se cancele también el proyecto hidroeléctrico privado sobre el río Masipedro en Bonao y que se obligue a Falconbrigde a cumplir con la ley y colocar filtros en sus chimeneas en sus operaciones en Bonao.

Que sea abandonada la indolencia del Ministerio de Medio Ambiente frente al abandono del río Camú y las invasiones del área protegida de Loma Guaguí en La Vega.