Dieciocho años después de haber sido condenado a 30 años de prisión por el asesinato de un mayor de la Fuerza Aérea ocurrido en el 2005, Guillermo Antonio Germán de los Santos continúa proclamando su inocencia del hecho que se le imputó, y solicita una revisión de su caso.
A través de su abogado Francisco Domínguez, aseguró que clasifica para obtener la libertad condicional, ya que ha cumplido más de la mitad de su condena y ha demostrado buen comportamiento en prisión, donde ha realizado 14 cursos. Sin embargo, se niega a presentarse ante un juez de ejecución de la pena y pedir perdón asegurando que no puede pedir perdón por un crimen que no cometió.
Dice que fue elegido como “chivo expiatorio” para cerrar el caso del mayor José Manuel Herrán Mancebo, basándose solamente en un retrato hablado de alguien que supuestamente se parecía a él.
Denunció que durante el proceso dos fiscales le ofrecieron reducirle la condena a dos años, y darle “dinero y privilegios en la cárcel” si decía que el exgeneral Pablo Leonel Velázquez, quien fue acusado y descargado como supuesto autor intelectual del crimen, lo había enviado a él a cometer el hecho.
“Yo en este caso soy una víctima, yo estoy preso injustamente tapando un hueco. Yo no he matado a nadie. A mí me cogieron preso por este caso sin yo tener conocimiento. Nunca vi el muerto, nunca he matado a nadie, gracias a Dios nunca he tenido problemas con la justicia”, sostuvo.
Su abogado dijo que la sentencia de condena fue apelada ante la Suprema Corte de Justicia (SCJ) y allí fue declarada inadmisible, no obstante a, a la fecha no han notificado decisión.