El experto eléctrico Bernardo Castellanos consideró ayer que el incremento de los apagones, de las pérdidas de energía y de las deudas con los suplidores de las empresas distribuidores de energía (Ede) y con las empresas eléctricas estatales evidencia la magnitud del desastre del sector eléctrico.
Indicó que la situación sector eléctrico se ha sido agravado y profundizado en estos cuatro años de gestión donde se han botado al zafacón unos US$5,000 en transferencias al sector eléctrico y cada vez de mal en peor.
Agregó que el propio presidente Luis Abinader admite públicamente que los apagones son insostenibles y las Edes constituyen un dolor de cabeza.
Por otro lado, afirmó que si disminuyen la empleomanía en Edesur y aumentan los gastos corrientes, eso significa que se está produciendo un aumento en los salarios de los altos funcionarios de empresa que es superior a los salarios que se eliminan por la reducción de la empleomanía.
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“El problema es el excesivo gasto corriente y las Edes que son empresas quebradas poseen un nivel de salarios y compensaciones a sus empleados y altos ejecutivos que no están acordes con los niveles de ingresos y eficiencia”, dijo.
Sostuvo que con esa política de salarios elevados en empresas quebradas que no mejoran la gestión ni el nivel de perdidas, las Ede están premiando y estimulando la ineficiencia y eso es una de las razones del continuo y permanente deterioro, unido a la baja inversión en reducción de pérdidas. Explicó que la empresa privada que se coloca como modelo de gestión eficiente no paga los niveles de salario y compensaciones que pagan las quebradas Edes. Reiteró que las Edes requieren mayor inversión en medidores, tecnologías antifraude y mejores cables.