El no vidente que laboraba en la Lotería Nacional, Miguel Mejía, rompió el silencio este lunes y admitió, que efectivamente, no pasó el bolo en el sorteo celebrado el pasado primero de mayo y que por el fraude le ofrecieron 800 mil pesos.
«Fui víctima de un engaño por creer en algunos seres humanos. Me buscaron por ser dizque hábil, para un sorteo extraordinario para transmitirlo fuera del país», reveló el señor con discapacidad visual durante una entrevista telefónica que le concedió al programa radial El sol de la mañana.
Mejía estaba consciente de la acción fraudulenta pero aduce que la propuesta que le hicieron originalmente fue para un sorteo fuera del país por su habilidad.
«Después de un tiempo es que me doy cuenta que estoy involucrado en eso, prácticamente ya sin poder salir, no sabía qué hacer, con dolor de mi alma continué”, prosiguió auque entendía que con sus revelaciones entorpecía el proceso de investigación que lleva a cabo el Ministerio Público.
«No sabía que era para la lotería», aseguró sin revelar los nombres de quienes le hicieron la propuesta. Sostuvo que por su discapacidad visual no puede asegurar quién es fue el creador del plan.
Señaló que el fraude millonario con el bolo número 13 se planificó desde marzo pasado y no fue hasta dos meses después que se decidió llevar a la práctica. Reveló además que ensayó con la locutora cómo hacer la trampa sin levantar sospechas.
«Única y primera vez y me arrepiento de eso», aseguró al indicar que devolvió los 800 mil pesos que le pagaron por realizar la trampa.
Mejía fue interrogado en la Procuraduría General de la República el pasado jueves por unas siete horas corridas y el viernes en las primeras horas de la mañana en relación a su vinculación con el fraude millonario.