El Departamento de Estado de EE.UU. anunció este martes 172 millones de dólares (157 millones de euros al cambio de hoy) de ayuda humanitaria adicional para Sudán y sus países vecinos.
El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, instó en un comunicado a las autoridades sudanesas a “eliminar la pesada burocracia y las restricciones burocráticas” que obstaculizan los envíos de ayuda humanitaria.
“Suministros que salvan vidas están retenidos en las aduanas y siguen una ruta a través de carreteras largas, peligrosas para alcanzar a las comunidades más necesitadas”, dijo el secretario de Estado.
Blinken recordó que los trabajadores humanitarios no pueden obtener los visados requeridos para acceder al país y entregar la asistencia.
Apuntó que EE.UU. y Arabia Saudí siguen con contacto “diario” con las partes para facilitar la distribución de ayuda.
Con los fondos anunciados este martes, Washington ha proporcionado más de 550 millones de dólares en asistencia humanitaria para Sudán y países vecinos que han acogido refugiados, como Chad, Egipto, Etiopía, Sudán del Sur y República Centroafricana, durante este año fiscal.
Desde el domingo, Sudán ha estado inmerso en una nueva tregua, de 72 horas, entre los paramilitares y el Ejército del país africano, que llevan enfrentados desde el 15 de abril.
El conflicto en Sudán ha provocado el desplazamiento interno y externo de más de 2,2 millones de personas, según las agencias de Naciones Unidas, una cifra que se añade a los 3,7 millones de desplazados internos con los que ya contaba el país, principalmente en Darfur.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó hace una semana que al menos 866 personas han muerto y otras 6.083 han resultado heridas desde el inicio de los combates en Sudán, y señaló que sus datos están actualizados hasta el 6 de junio y fueron facilitados por el Ministerio de Salud sudanés.