Moisés Mejía Hiches 
El uso excesivo de azúcar puede provocar complicaciones en tu cuerpo.
No se puede negar: añadir azúcar a algunos alimentos puede mejorar su sabor pero, a cambio, hay que pagar un precio muy alto para la salud
El azúcar es uno de esos alimentos que junto con los carbohidratos son uno de los villanos favoritos de la alimentación saludable, pues lo que le pasa a tu cuerpo cuando consumes azúcar en exceso puede tener serias consecuencias en el organismo, incluida la obesidad y la temida diabetes.
Pero, ¿qué tanto sabemos del daño que causa comer demasiada azúcar? Quizá has escuchado que un dulce provoca caries o que está asociada a la diabetes y a la obesidad, pero los daños suelen ser más, ya existen problemas que quizá desconocías, como tener acné, orinar demasiado o sufrir cáncer. Aquí te contamos lo que pasa.
¿Qué le pasa a tu cuerpo si consumes demasiada azúcar?
Cansancio
Aunque el primer efecto es un golpe de energía, consumir demasiada azúcar crea un choque en las orexinas, unos neurotransmisores ubicados en el hipotálamo que forman proteínas en el cerebro y que son responsables del ciclo del sueño, entre otras funciones. Al haber una suspensión de esta cadena el cuerpo experimenta fatiga, irritación y sueño después de comer.
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Sufrir caries
El azúcar contribuye a alimentar las bacterias que viven en la boca, por lo que se incrementa el riesgo de sufrir caries dental y debido al aumento de la acidez, se erosiona el esmalte dental, provocando otros daños en los dientes.
Engordar
Al consumir demasiada azúcar estás teniendo una ingesta excesiva de calorías o energía que de no consumir, se va acumulando en el organismo, lo que crea el sobrepeso y la obesidad. Además de que al sentir fatiga evitas hacer ejercicio, lo que se vuelve un ciclo difícil de romper.
Tu cuerpo crea adicción
Mientras más azúcar comes, tu cuerpo y tu cerebro crea mayor adicción al azúcar, poco a poco la comida deja de tener sabor y requieres de más cantidad de dulce.
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Malos olores
El azúcar puede unirse a la cándida, un tipo de levadura que vive en el sistema digestivo y en la piel, y la hace crecer de una forma descontrolada, lo que genera malos olores en los pies, en la boca e infecciones vaginales.
Orinar demasiado
Cuando ingieres demasiada azúcar tus niveles de glucosa aumentan y los riñones no son capaces de reabsorber los líquidos, por lo que es común que se incrementen tus ganas de orinar y esto además de deshidratarte, contribuye a desechar minerales esenciales.
Se debilita tu sistema inmunológico
El consumo excesivo de azúcar promueve una inhibición del sistema inmunológico, ya que los glóbulos blancos reducen su movilidad en la sangre y son éstos los encargados de destruir algunos virus, por lo que es más común que te enfermes o contagies de alguna enfermedad.
Creas resistencia a la insulina
Al comer azúcar, los receptores del sabor envían una señal al cerebro y éste al páncreas que secreta insulina para desintegrarla y convertirla en energía, pero al consumirla con regularidad el cuerpo genera resistencia a la insulina, lo que a su vez aumenta el riesgo de sufrir obesidad.
Envejecimiento prematuro
Ingerir demasiada azúcar aumenta los problemas de acné, piel seca y arrugas, debido a que promueve la deshidratación al estimular la orina, reduce la eficiencia de las proteínas para formar colágeno y desequilibra las hormonas.
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Aumentas el riesgo de sufrir diabetes
Al experimentar resistencia a la hormona de la insulina, en la sangre se empieza a formar glucosa y hay un desequilibrio general que puede provocar prediabates, diabetes tipo 2 y diabetes gestacional.
Podrías sufrir depresión
Al comer mucha azúcar tu cerebro libera dopamina, también conocida como la «hormona de la felicidad», pero también aumentan la inflamación en organismo y en el cerebro, por lo que puede desencadenar depresión, estrés y ansiedad.
Aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares
Consumir demasiada azúcar está relacionada al desarrollo de la hipertensión o aumento de la presión arterial, pues fomenta la acumulación de placa en las arterias, por lo que también afecta a la salud cardiovascular.
Aumenta el riesgo de cáncer
El consumo excesivo de azúcar fomenta el estrés oxidativo de las células, la obesidad y la inflamación, por lo que es un factor de mucho riesgo para sufrir cáncer.
Aumenta tu riesgo de sufrir demencia
Debido a que se crea resistencia a la insulina, se genera un síndrome metabólico que es causante de varias enfermedades, entre ellas demencia, Alzheimer y deterioro cognitivo, ya que hay una reducción del hipocampo.
