Una veintena de propietarios de empresas que suplían al programa de alimentación escolar se plantaron ayer frente a la sede del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie) para demandar que se les restablezcan sus contratos tras estos ser cancelados, según afirman, de manera arbitraria.
Los manifestantes aseguran que cientos de mipymes que están habilitadas para suplir al Estado fueron sacadas del programa de alimentación escolar luego de que el nuevo director del Inabie, Víctor Castro, “ignorara” las sugerencias que le planteó una comisión representante de los oferentes afectados por las irregularidades en esa institución, que van desde la solicitud de dinero para asignar raciones hasta la adjudicación de oferentes sin cocinas instaladas.
Los protestantes anunciaron que también llevarán su lucha a la Dirección General de Contrataciones Públicas (DGCP).
Inabie responde
En una nota, el Inabie indicó que está centrado en un “recomienzo transparente y ético, pero debe ser prudente ante la idea de deshacer procesos anteriores, pues esto puede generar un caos en la cadena de suministro alimentario a los estudiantes, quienes son nuestra prioridad”.
La entidad recordó que ha dado respuesta a más de 100 impugnaciones que han ejecutado los proveedores afectados para dar curso a sus inquietudes.