La familia de Ventura Ferreras Guzmán denunció las desconsideraciones que sufrió en las clínicas Vista del Jardín e Independencia Norte, a las que acudieron con la señora la noche del viernes con un dolor estomacal.
Su hija Petra Saviñón narró que en el primer centro ni el médico ni la enfermera les asistieron cuando entraron con su madre, que no podía estar de pie y que al requerirle, el doctor la mandó a sentarla en una silla y volvió a la estación a discutir con una compañera.
“Cuando salió, al preguntarle quién la atendería, me expuso en tono airado que siguiera sentada que había otros primero. Le señalé que entendía justo atender a los que estaban antes pero que ni siquiera me indicaron una camilla pese a la situación. Solo después de esto, la enfermera me dijo que la acostara pero ante la actitud anterior, salimos”, contó.
Expuso que al llegar a la clínica Independencia, dos médicos solícitos les ayudaron y el encargado de la emergencia, el doctor Mera, la mandó a facturar medicamentos y análisis, por un monto “aproximado” superior al que disponían. Entonces eliminó un estudio y al preguntarle por qué no daban un precio exacto en lugar de “aproximado” si sabían cuanto costaba cada insumo, respondió que había “que ver primero”.
En tanto, la joven de caja solo expresó “política de la empresa” y hasta que no facturaron no la atendieron.
Cuando pagamos, nos dijeron que era un depósito, si la cuenta fuera menor nos devolverían y de ser mayor pagaríamos más. Una incongruencia, bastaba dar el precio real y si la idea era que pagáramos si el monto fuese mayor, por qué por falta de dinero dejaron fuera un análisis. Al final, el saldo fue mucho menos, y hubiese permitido incorporarlo.