Río de Janeiro.– El proyecto “Viva Volei”, que pretende popularizar el Voleibol entre los niños de las comunidades brasileñas más humildes y que está siendo impulsado por la Federación Internacional de Voleibol (FIVB), inauguró este martes su primera cancha en Río de Janeiro en la favela de Formiga.
Este campo de juego, ubicado cerca del estadio de fútbol de Maracaná, acogerá a niños de entre siete y quince años todos los días, llegando a gestionar actividades para un total de 200 niños por semana con distintos profesores que se adaptarán al nivel y habilidades de los alumnos en este deporte.
El objetivo de esta instalación, que hasta ahora también servía para que los habitantes de la favela pudieran jugar a baloncesto y fútbol, es fomentar el deporte y “buenos valores” para que los niños los apliquen en los otros campos de su vida.
Durante la inauguración, celebrada en presencia del presidente del FIVB, Ary Graça y del director general, Fabio Azevedo, los niños de la favela pudieron disfrutar por primera vez de las instalaciones con varios profesores que les mostraron las nociones básicas necesarias para jugar al voleibol.
Para Graça, de origen brasileño, este deporte “es un deporte de paz”, ya que “al haber una red en medio no hay contacto, no hay conflicto, no hay peleas».
Estas características, aseguró Graça, son muy importantes porque, al contrario que otros deportes, esta modalidad resulta más atractiva para “las mujeres y para las familias».
Asimismo, enfatizó que este el voleibol es muy barato, ya que puede jugarse en cualquier lugar, y eso permite que personas de todas niveles económicos lo puedan practicar. Para él, este deporte deberá convertirse “en un deber” en los próximos años, no solo por la fama que está adquiriendo a nivel internacional sino por todo el beneficio que puede aportar al mundo.
Pese a inaugurarse en pleno ambiente olímpico, los organizadores no ven estas instalaciones como una forma de captar jugadores profesionales. “Si sale un jugador de aquí sería perfecto pero no trabajamos para eso”, explicó el gerente de desarrollo del Comité Brasileño de Voleibol (CBV), Marcos Aurelio Gonçalves.
Las instalaciones para voleibol serán mantenidas durante cuatro años, un periodo en el que contarán con la financiación de la FIVB; por eso, los habitantes y profesores locales se mantienen a la expectativa de que, una vez finalice este plazo, la federación renueve las ayudas.
La inauguración de esta cancha va seguida de otra similar en Leme, cerca del barrio de Copacabana, que será abierta al público este jueves, un día antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos.
Entre ambos proyectos, la FIVB va a invertir 40.000 dólares anuales, que recibirán dicha cantidad de dinero hasta el año 2020. El proyecto Viva Volei ha abierto instalaciones en 57 lugares de Brasil dispuestos entre 16 estados