“Tanto el libro como la cultura tendrán que aprender a vivir con la tecnología”.

La Feria Internacional del Libro de Santo Domingo (FILSD 2024) se consolida como uno de los eventos culturales más importantes del Caribe, un espacio donde se encuentran autores, editoriales y lectores de diversas partes del mundo.

En su edición 2024, este evento se destaca por su enfoque renovado en la accesibilidad, la diversidad literaria y la innovación, todo bajo la dirección de Joan Ferrer, director de Ferias del Libro del Ministerio de Cultura.

Fomento a la lectura

Uno de los mayores retos para este año fue hacer que la literatura sea accesible para todos, sin importar su poder adquisitivo. Ferrer explica: “Desde el Ministerio de Cultura, trabajamos incansablemente con librerías y editoriales para que los precios sean justos y accesibles. La feria tiene que ser un espacio donde todos puedan llevarse un libro a casa”.

Para hacer frente a este reto, se han implementado programas como el Bono Libro, que busca proporcionar libros a aquellos que no tienen recursos para comprarlos. “El Bono Libro es solo uno de los muchos esfuerzos para que la literatura llegue a todos”, agrega Ferrer. Además, el estand del Ministerio de Cultura promueve el intercambio de libros usados, permitiendo que más personas puedan acceder a la lectura sin restricciones económicas.

Diversidad y pluralidad

La feria, que continúa hasta el 17 de este mes en la Plaza de la Cultura, no solo se enfoca en la accesibilidad económica, sino también en la pluralidad de voces. Ferrer destaca que uno de los pilares fundamentales de la feria es garantizar un espacio para todos los géneros y enfoques ideológicos.

“La Feria Internacional del Libro debe ser una plataforma abierta a la diversidad literaria, a los distintos enfoques políticos, sociales y culturales. La literatura debe ser libre y sin censura”, explica.

En este sentido, la política de libre comercio es clave para el evento. Ferrer explica que, si bien no se puede dictar qué libros vender, se exige a los libreros que no comercialicen libros piratas y que aquellos títulos destinados a públicos específicos, como los niños, estén adecuadamente colocados.

La respuesta del público ha sido positiva, con una creciente participación de jóvenes interesados en géneros como el cómic y la literatura juvenil, lo que ha diversificado aún más la oferta del evento.

Innovación tecnológica

La FILSD ha dado un paso más en su compromiso con la innovación. En 2024, los visitantes pueden disfrutar de una experiencia interactiva gracias a la incorporación de la realidad aumentada. A través de teléfonos inteligentes y tabletas, los asistentes pueden explorar la feria de una manera más dinámica, descubriendo detalles y contenidos extra en distintos puntos del evento.

Otro atractivo ha sido el Pabellón de la Imaginación, que reúne proyectos de innovación tecnológica de universidades y centros educativos del país. “Queremos que la feria no sea solo un lugar donde se vendan libros, sino un espacio de encuentro entre la literatura, la tecnología y la cultura en general. Hay algo para todos los gustos y edades”, dice Ferrer.

Un momento destacado ha sido el Mapping 3D, una proyección sobre la fachada del Teatro Nacional, que ha permitido a los asistentes revivir grandes clásicos de la literatura universal de una manera visualmente impactante.

Homenajes

Uno de los momentos más emotivos de la feria fue el homenaje a figuras que han dejado huella en la literatura. Este año, se rindió tributo a la escritora dominicana Rhina Espaillat, quien ha sido una referencia para muchos escritores dominicanos en el extranjero. Ferrer destaca: “Rhina Espaillat es un ícono de la literatura dominicana en el exterior. Su obra ha marcado a generaciones, y su dedicación al mundo literario merece ser celebrada”.

El homenaje local fue para Mateo Morrison, destacado poeta y escritor dominicano, una figura influyente que continúa contribuyendo a la literatura nacional.

Más público

La feria no solo ha atraído a un público fiel de dominicanos, sino también a visitantes internacionales. Ferrer destaca con orgullo que las ventas de libros el año pasado superaron los RD$50 millones y que esperan superarlo en 2024.

“Lo más importante es que vemos cómo el público lector sigue creciendo. Cada vez más jóvenes, adultos y extranjeros se suman a este encuentro literario”, comenta Ferrer.
La participación activa de niños y jóvenes ha sido una de las señales más positivas, pues refuerza la idea de que la lectura está en auge en el país.

Proyectos a futuro

A pesar de los éxitos, la feria enfrenta retos importantes. El principal obstáculo sigue siendo la falta de un centro de convenciones adecuado. Ferrer señala que, aunque la Plaza de la Cultura es un espacio hermoso, la feria necesita un centro de convenciones moderno, con mejores instalaciones y acceso. “Un lugar con mayor capacidad de transporte y parqueo permitiría mejorar la logística y la organización”, asegura.

En cuanto al futuro, Ferrer es optimista. “Queremos que la feria sea cada vez más grande, diversa y accesible. Planeamos incorporar más editoriales internacionales y mejorar los espacios para el público. La idea es que cada vez más personas, tanto locales como extranjeras, se sientan parte de este evento cultural”, afirma.

Un país de letras

Para Ferrer, la feria es clave en el proceso de construcción de un país de lectores. “La Feria Internacional del Libro es una herramienta fundamental para fomentar la lectura en el país. No podemos esperar que la gente lea más si no les ofrecemos los espacios adecuados”, reflexiona.

Una de las iniciativas que ha tenido un gran impacto ha sido la colaboración con el Ministerio de Educación para que miles de estudiantes puedan acceder al evento y participar de las actividades literarias. “El desafío es enorme, pero la feria está cimentando las bases de un país de letras, un país en el que la lectura sea un hábito común”, concluye Ferrer.

Agenda feria del libro 24

10:00 a. m. “Juego y Pienso”: exploración sobre preferencias de lectura (para estudiantes). Sala de Encuentros (Bar Juan Lockward, Teatro Nacional).

10.00 a. m. Taller: “¿Cómo escribo mi primer cuento?” (para estudiantes). Impartido por Vladimir Tatis. Pabellón de Animación a la Lectura y la Escritura (auditorio del Museo de Historia Natural).

3:00 p. m. Taller: “Escritura de guión para cómics”. Facilitador: Gerardo Castillo. Pabellón del Cómic.

5:00 p. m. Coro Nacional Juvenil Dominicano. Coordinación: Ministerio de Cultura. Escalinatas del Teatro Nacional Eduardo Brito, Plaza de la Cultura.