El francés Nicolas Pisapia, que lleva un proceso de apelación en República Dominicana, pidió hoy a la corte que lo absuelva del cargo de narcotráfico, del que se desligó, y declare nula la sentencia de primera instancia que lo condenó a 20 años de cárcel.
«Yo no soy culpable de nada, yo soy inocente», declaró el francés al leer un texto ante los jueces de la sala penal de la Corte de Apelación en Santo Domingo, asistido por una intérprete y precedido en el turno por su abogado.
Pisapia figura como el pasajero que iba a bordo del avión Falcon 50 incautado con 700 kilos de cocaína el 19 de marzo de 2013.
El proceso, al que acudió su abogado francés Julien Pinelli, continúa el próximo viernes 29, con la comparecencia de uno de los cuatro dominicanos condenados en el mismo expediente.
Sobre la sentencia de agosto de 2015 Pisapia insistió en que «nada deja ver un indicio contra mí, ni relaciones con los miembros de la red, ni de conversaciones con otras personas; no hay escuchas telefónicas, no hay ninguna relación», con los 700 kilos de cocaína incautados en un aeropuerto del este de Dominicana en marzo de 2013.
Alegó que las juezas del Primer Tribunal Colegiado de Primera Instancia sólo se basaron en la declaración de uno de los dominicanos implicados en el frustrado cargamento de droga, al que pidió no dar crédito, porque lo hizo para buscar una condena reducida.
«Ante la ausencia de pruebas, ante los falsos testimonios, los falsos temores y actas falsificadas, ante la violación total de todos mis derechos, no es posible que yo pueda ser condenado por hechos que yo no he cometido», agregó Pisapia.
Su abogado en el país, Andy de León, había pedido a los jueces declarar absuelto a su defendido y que, en caso de encontrar alguna responsabilidad en él, le dicte una pena mínima, que se salde con el año y tres meses que estuvo en prisión preventiva.
Ya el tribunal determinó ratificar la pena de 20 años de cárcel contra los pilotos de la aeronave incautada con la droga, Pascal Jean Fauret y Bruno Odos, quienes evadieron la justicia dominicana en octubre pasado y de quienes se desligó Pisapia.
«Yo sé que su justicia y el pueblo dominicano fueron ofendidos por la huida de los señores Pascal y Odos y temo que por ello tenga que soportar alguna consecuencia, pero yo me dije que su Justicia era suficientemente inteligente para ello», argumentó llevándose las manos a los ojos, en señal de congoja.
«Mi presencia aquí prueba que no tenía nada que ver con ellos, pero sobre todo toda la confianza que yo tengo en ustedes», continuó Pisapia, quien iba de pasajero en la nave que preparaba vuelo para Francia.
Sostuvo que llegó al país en un vuelo subvencionado por clientes suyos para hacer trabajos relacionados con su función de gestor inmobiliario y sostuvo su alegato de siempre de que no tenía conocimiento del contenido de las 26 maletas ocupadas.