El boxeador dominicano de 24 años de edad se mantiene invicto en el boxeo profesional con récord de 15 victorias, 10 de ellas por la vía rápida
El gran prospecto del boxeo dominicano Francis Frómeta “El Terrible Jonás”, protagonizará el combate estelar de la atractiva cartelera de boxeo profesional que está siendo organizada por la empresa The King of Boxing y que tendrá lugar el próximo día 2 de abril en el Pabellón de Esgrima del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
Frómeta, de 24 años, quien se mantiene invicto en el boxeo profesional con récord de 15 victorias, 10 de ellas por nocaut, tendrá de frente al veterano boxeador nicaragüense Oliver Flores, quien presenta la impresionante foja de 30 triunfos con 19 nocauts, cuatro derrotas y dos empates.
El combate entre Frómeta y Flores ha sido pactado a 10 asaltos en la división ligero (135 libras). Los ejecutivos de la empresa The King of Boxing informaron que en el combate entre Frómeta y Flores estará en disputa el título Fedelatin que avala la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
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Al hablar de su próximo combate, Frómeta dijo que se siente muy emocionado debido a que el mismo le permitirá enseñar cuanto ha avanzado en el boxeo. Agregó que combates como el que celebrará ante Flores son los que le permitirán enseñarle al mundo que puede ser campeón.
“Es el tipo de combate que quiero y necesito, ganándole a rivales como Flores es que puedo demostrar que puedo ser campeón mundial”, dijo Frómeta momentos después de concluir una sesión de entrenamientos en el gimnasio Maquiteria.
Sánchez cree que Golovkin debe ser agresivo ante Murata y Canelo
El que fuera entrenador de Gennady Golovkin, Abel Sánchez, habló sobre las dos próximas peleas del kazajo frente al japonés Ryota Murata y la tercera frente al mexicano Saúl “Canelo” Álvarez.
Sánchez logró imponer a Golovkin aquel famoso “Mexican Style”, un estilo agresivo y destructor que acababa con sus rivales a base de presión y de golpes de poder, demoliendolos a golpes.
Después de que Golovkin rompiese con Sánchez, “GGG” casi desapareció del panorama boxístico con largas ausencias sin boxear. Además, Sánchez era un entrenador que sabía promocionar muy bien sus peleas ante los medios con continuas entrevistas.