El ex presidente Hipólito Mejía se desligó hoy su gestión de gobierno de los casos de corrupción que involucra a la empresa constructora Odebrecht, la cual declaró haber otorgado entre 2001 y 2014, sobornos por 92 millones de dólares a funcionarios dominicanos, para lograr la adjudicación de obras del Estado.
En una alocución dirigida al país por una red de medios de comunicación con el objetivo de dar a conocer su posición sobre el caso, Mejía, quien gobernó el país en período 2000-2004, aseguró que ni en éste ni en ningún otro caso ha actuado al margen de la ley, como algunos de manera irresponsables, han querido atribuirles, sino que por el contrario, la lucha contra la corrupción siempre ha sido parte fundamental de sus posiciones públicas.
En ese sentido, retó a cualquier persona que le demuestre con seriedad y veracidad algún caso de corrupción en la que se haya visto involucrado él o alguna de su familia, tras garantizar que de ser así estaría dispuesto a retirarse de la vida pública.
Mejía explicó que en ninguna de las obras que se construyeron en su gobierno, incluyendo la presa de Pinalito, en Constanza, o la construcción de la Línea Noroeste, hubo actos al margen de la ley con la empresa Odebrecht.
El ex jefe del Estado lamentó que a dos meses de que se haya destapado a nivel internacional el caso de Odebrecht, las autoridades dominicanas todavía no den informaciones convincentes a la población dominicana.
Precisó que la decisión del juez Alejandro Vargas de declarar inadmisible el procedimiento de homologación del acuerdo realizado por el Ministerio Público y la empresa brasileña Odebrecht, agrega un elemento de incertidumbre a este caso de corrupción.
Mejía dijo que está convencido de que en este caso la justicia tienen una gran oportunidad de poner ejemplo para combatir la impunidad que existe en la República Dominicana.
Respalda movilización. En su discurso, Hipólito Mejía reiteró su respaldo a las movilizaciones pacíficas de la ciudadanía, en contra de la corrupción y la impunidad que prevalece en el país.
Insistió en que no tiene nada que ocultar de su conducta como persona pública, y que no es la primera vez que se le ha atribuido haber cometido casos de corrupción, sin embargo, el tiempo ha demostrado que son acusaciones infundadas.
«Se me atribuyó la propiedad de la finca Aguayo; del proyecto de Mango de Fundación, en Baní, y de la finca Ganadera de YSURA, en Azua, entre otras. En todos esos casos, el tiempo demostró que tales aseveraciones eran infundadas”.