Por: José Alfredo Espinal / Raymundo Infante

Doce meses como medida de prisión preventiva impuso la noche de este miércoles la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de este distrito judicial, a un funcionario acusado de matar a una pareja de esposos y herir de bala a dos personas, en un hecho ocurrido el pasado martes 7 de los corrientes, en un centro de diversión de esta localidad.

La jueza Wanda Vargas dispuso la sanción contra Carlos Juan Rodríguez García, de 34 años, director provincial del Ministerio de Industria y Comercio, principal implicado en la muerte a tiros de los esposos Juan de los Santos Peralta Barrientos (Kendry), de 35 años y Marielis Anabel Vargas Villalona, de 27.

En el incidente también resultaron heridos el regidor de la Fuerza del Pueblo y empresario del transporte Erlin Alberto Gómez Rodríguez (Tito Tours), y Edward de Jesús Espinal Fernández.

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La jueza Vargas ordenó que el imputado cumpla la medida preventiva en el Centro de Corrección y Rehabilitación de Mao, provincia Valverde.

De acuerdo al expediente acusatorio del Ministerio Público, el agresor la emprendió a tiros contra las víctimas sin «justificación» estando bajo los efectos del alcohol.

El órgano otorgó la calificación jurídica de criminal por haber incurrido en la violación de los artículos 2, 309, 295, 304, del Código Penal Dominicano, que tipifica los golpes y heridas como homicidio agravado.

Inidca que el imoutado también incurrió en la violación de los artículos 66, 67 y 86 de la Ley 631-16, la cual tipifica el delito de Porte y Tenencia Ilegal de Armas, en perjuicio de las víctimas y del Estado dominicano.

La medida de coerción fue conocida en medio de un ambiente tenso protagonizado por decenas de personas en las afueras del Palacio de Justicia que, pese a las lluvias, se mantuvieron a la expectativa del proceso judicial, pidiendo que el acusado reciba todo el peso de la ley.

La pareja fallecida fue atacada a tiros por Rodríguez García, mientras se encontraban en el centro de diversión El Ganadero, situado en una estación de combustible del barrio Cambelén, carretera salida de Sabaneta Villa Los Almácigos.

Su asesinato causó gran consternación entre los moradores de esta localidad que aún no salen del asombro.