Inversión del 4% no ha elevado la calidad en educación

Inversión del 4% no ha elevado la calidad en educación

Por: Estarlin Canelo y Mirla Soto

A 10 años de aprobar el 4% del Producto Interno Bruto (PIB) para el Ministerio de Educación, el sistema se encuentra en los últimos lugares de las mediciones internacionales debido a que el total de los recursos asignados y ejecutados hasta septiembre del 2022, se han destinados para el pago de remuneraciones y contribuciones, sobresueldos, contrataciones, dietas, viáticos y otros, en perjuicio de la calidad del proceso de enseñanza-aprendizaje.

Según el desglose presupuestario de la entidad educativa, ha destinado en los últimos nueve meses de este año el 65.1% (RD$150,565,057,280.05) para honrar esos compromisos de los RD$231,147,700,000.00 (4% PIB) otorgado al MINERD lo que ha sido criticado por diversos sectores, incluyendo Educa.  Sin embargo, el propio ministro Ángel Hernández afirma que han gastado en sueldos a maestros y empleados el 82% de lo consignado a la institución.  

Hernández indica que en remuneraciones y contribuciones, la institución pagó el 41.3% (95,477,101,406.78) entre enero-septiembre del 58.5% (135,317,610,464.63) presupuestado para ejecutar durante los doce meses del años, solo previendo invertir el 5% (RD$11,568,715,000.00) para mejorías pedagógicas.

El funcionario agrega que en remuneraciones han desembolsado RD$81,147,487,393.34, equivalente al 35.1% en momento en que el sistema educativo sigue en decadencia al ocupar los últimos lugares, entre 76 y 79 en las mediciones de estudios internacionales, como lo devala el Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA).

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Las autoridades consignan en la división del «pastel» el 10.14% (RD$23,456,173,474.53) para contrataciones de servicios y para otras contrataciones de servicios el 8.2% (RD$18,969,221,874.05) dejando evidenciado el «derroche de papeletas» existentes que dejan de lados la inversión para un sistema educativo de calidad.

El Botín continúa repartiéndose entre transferencias corrientes donde han devorado el 7.9% (RD$18,335,034,211.33), en contribuciones a la Seguridad Social el 5.8 (RD$13,503,168,074.75), en transferencia corriente al sector privado el 5.2% (RD$12,237,262,019.18); en transferencias corrientes a otras instituciones el 2.5% (RD$5954604759.53), en Bienes, muebles e inmuebles gastó el 2.4% (RD$5,764,742,028.28).

Además, de las autoridades educativas han desembolsados para mobiliarios y equipos el 2.4% (RD$5,571,357,743.61) de los recursos asignados al Ministerio de Educación, cuya prioridad está enfocada en transformar el sistema para lograr calidad debido a que los estudiantes de 10 años (62.3%) no pueden leer ni comprender un texto simple, según el más reciente Boletín de Competitividad Sectorial (BCS 2021) del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (Mepyd).

Señala que en materiales y suministros gastaron el 1.8% (RD$4,335,446,839.81); en obras el 1.3% (RD$3,196,559,319.32) e igual cantidad para obras y edificaciones, en productos de papel, cartón e impreso el 1% (RD$2518245418.14).

Agrega que el 3% (RD$6,935,680,008.76) se invertido en el pago de sobresueldo, dietas y gastos representación, gratificaciones y bonificaciones, servicios básicos, publicidad, impresión y encuadernación, viáticos, transporte y almacenaje, alquileres y rentas, seguros, servicios de conservación, reparaciones menores e instalaciones temporales.

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Además de otros servicios no incluidos en conceptos anteriores, materiales y suministros, alimentos y productos agroforestales, textiles y vestuarios, productos farmacéuticos, productos de cueros, cauchos y plástico, productos metálicos y no metálicos, combustibles, lubricantes, productos químicos y conexos.

Asimismo, en gastos que se asignarán durante el ejercicio y útiles varios, transferencias corrientes al sector externo, mobiliario y equipo, mobiliario y equipo educacional y recreativo, equipo e instrumental, científico y laboratorio, vehículos y equipo de transporte, tracción y elevación, maquinarias, otros equipos y herramientas, equipos de defensa y seguridad, bienes intangibles, edificios, estructuras, tierras, terrenos y objetos.        

El ministro Ángel Hernández expresa que solo el 5% impacta en la parte pedagógica del sistema educativo público, como los recursos de aprendizaje,  la formación  de docentes, el equipamiento de los planteles y otros aspectos que inciden en la calidad del aprendizaje. 

18% de la partida asignada al Ministerio de Educación, o sea RD$41,606 millones, se invierte en el pago de pensiones. Afirma Hernández

Todo esto, en un año escolar marcado por la escasez de butacas, aulas y maestros, y en medio del clamor popular para lograr un sistema educativo de calidad, que garantice las competencias necesarias en el plano local e internacional. Así, los resultados del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA) al sistema educativo dominicano, han dejado ver un «rosario de carencias», por las dificultades de los alumnos de primaria y secundaria para comprender y analizar de manera crítica libros de textos; así como para comprender en un orden lógico las operaciones matemáticas. 

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República Dominicana ha sido evaluada en dos ocasiones en las pruebas PISA: por primera vez, en 2015, quedando en el quinto lugar con el puntaje más bajo de los 72 países evaluados. En la segunda y última ocasión, ocupó la posición 76 en lectura, 78 en matemáticas y ciencias, de las 79 naciones valoradas en 2018. Para diversos sectores, estos resultados de PISA muestran que una gran parte de los recursos del Minerd no se han destinado a las mejoras en los procesos de enseñanza, dejando al descubierto el sistema educativo de República Dominicana.

Otro apunte desalentador lo muestra el más reciente Boletín de Competitividad Sectorial (BCS 2021) del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (Mepyd), devela que un 62.3 % de la población estudiantil de 10 años no podía leer ni entender un texto simple.

Ante el fallido esfuerzo para lograr calidad educativa, el ministro de Educación, Ángel Hernández, lamentó que República Dominicana se encuentre en los peores lugares como revelan organismos internacionales. Y a pesar de que en el país se construyeron 22,000 aulas adicionales en 2020 pasando de 34,000 a 52,000 espacios educativos, todavía el año escolar se enfrenta a elementos muy básicos de la enseñanza, como la falta de butacas, personal docente y aulas.

El ministro Hernández, que recién asumió el cargo, afirma que su gestión trabajará para fortalecer en las aulas el aprendizaje de los alumnos, a fin de superar la barrera de la calidad y competir con otros países de la región. Y para ello, asegura que conjuntamente con los docentes ejecutan planes y proyectos en las aulas, inclinados a lograr un proceso de enseñanza-aprendizaje de calidad educativa.      

Cómo se mide la calidad educativa

El Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE) toma como referencia 13 parámetros, que incluyen desde los procesos administrativos del sistema y la racionalidad de los recursos, hasta la investigación y el compromiso que tenga la familia en el proceso educativo del estudiante.

¿Cómo se encuentra República Dominicana en estos parámetros? El profesor Juan Valdez, director del Observatorio Educativo Dominicano y profesor por más de 30 años, analiza varios de esos puntos, entre ellos, el hecho de que los propios indicadores del Sistema Nacional de Monitoreo de la Administración Pública (SISMAP), han ubicado al Ministerio de Educación (MINERD) como uno de los cinco ministerios peor gestionados.

“Esto es lo que, en términos de gestión de calidad, explica porqué, temas como la alimentación escolar, los medios y recursos para el aprendizaje y los servicios educativos son de tan baja calidad”, asegura. “La inversión en educación es indispensable para garantizar la calidad educativa. Sin embargo, por sí sola no garantiza la calidad educativa. La calidad del gasto educativo, sí”, puntualiza.

¿En qué hemos gastado el 4% del PIB destinado al MINERD?

Para la exdirectora del Consejo Nacional de Educación y actual Decana de la Escuela de Educación de la Universidad UTE, Victoria E. Jerez, en los últimos de 10 años, las autoridades del Ministerio de Educación priorizaron la construcción de infraestructuras físicas, sin ningún diagnóstico para ver la necesidad de obras.

«Parecería que construyeron muchas escuelas sin diseñar un plan sobre las causas que obstaculizan el proceso de aprendizaje en el aula, con alternativas de mejora en la calidad del proceso educativo», apunta. Los datos oficiales apuntan que entre el 2012 y el 2020, se construyeron cerca de 24,000 nuevas aulas, para sumarlas a las 33,000 que ya existían antes de ese periodo.

Inversión en Formación Docente

La inversión en formación docente representa el 1.61 % de la ejecución del Ministerio de Educación en el año 2020. Mientras que este gasto muestra una participación de 0.07 % del PIB en el mismo año. En los últimos 10 años se formaron 18,895 personas en licenciaturas de Educación, se habilitaron para la docencia 3,080 personas de otras carreras y se graduaron 13,278 docentes participantes en cursos de posgrado.

Con el fin de realizar lo establecido en los planes estratégicos y cumplir con lo planteado en el marco legal que rige al Minerd, en el año 2020 se destinaron 3,240.84 millones de pesos para la formación docente. Esto representa un crecimiento de 969.94 % con respecto al año 2010, cuando la inversión era de 37.43 millones de pesos.

Desde el 2013 hasta el 2020 la República Dominicana ha invertido US$28,970,905, millones en los presupuestos de los últimos ocho años de inversión del 4% del PIB. En pago de personal, en este periodo se han destinado RD$500,156,103,717, lo que representa la mayor parte del presupuesto gastado por Minerd. En el 2019 y 2020 fueron los años donde más se gastó en nómina, con RD$84,573,088,373 y RD$88,850,080,100 millones de pesos, respectivamente.

En materiales educativos para mejorar el aprendizaje de los alumnos de escuelas públicas, lainversión no sobrepasó los 25 millones, siendo el 2017 el año en que el Minerd más invirtió en materiales, con RD$20,843,858,128 millones, a diferencia del 2014, cuando la inversión fue de apenas RD$1,676,479,582.

Los datos del Ministerio de Educación revelan que la mayor parte de su presupuesto se ha destinado en pagos y salarios de maestros y programas de apoyo, dejando de lado la inversión en mejoras para la implementación de técnicas, tecnologías, libros y otras herramientas para mejorar los métodos de enseñanza-aprendizaje o realizar reformulación a profundidad en el currículo escolar.

Una de las grandes críticas que ha acompañado al sector se sustenta en los aumentos salariales sin que los maestros hayan experimentado en estos años una mejoría en sus capacidades profesionales. En efecto, hoy día, el servicio de enseñanza en el sector público es el tercero mejor pagado de todas las áreas de la economía, con un sueldo promedio de RD$53,800.

Un docente de educación primaria pasó a devengar un salario promedio real de RD$26,259 en 2013, a RD$57,668 para el 2020, lo que equivale un aumento de 120%. De referencia, se puede tomar el salario promedio de un joven periodista, cuyo salario de contratación base se puede encontrar en RD$25,000, como hace 10 años.

¿Qué nos falta?

Para Caraballo, existe una especie de obsolescencia del modelo educativo no solo de República Dominicana, sino de la gran parte del mundo. «Por eso el país hoy está llamado a transformar esa propuesta académica, simplificar el curricular escolar, revisar las lógicas de trabajo en los centros educativos, repensar el rol del educador y es una buena iniciativa que todo aquel tenga un rol docente, ingrese a través de un concurso competitivo», dijo el especialista.

Cabe destacar que en los informes del MINERD no se destina ningún monto para mejora o remodelación del Currículum escolar, al igual que no existe ningún apartado donde se refleje lo invertido para la implementación de nuevas técnicas, al igual que se destina una cantidad mediocre del dinero para la preparación del personal.

 “Increíblemente, aunque el sistema escolar dominicano se embarcó́ en un rediseño curricular, entre 2012 y 2015, hasta 2021, no se había podido entregar a las escuelas dominicanas los materiales didácticos para la ejecución del mismo. La sobrecarga de la programación académica y la desconexión entre dicha programación y los logros de aprendizaje estudiantil han envuelto a la educación dominicana en una simulación más enfocada en el cumplimiento, que en el aprendizaje y el desempeño”, crítica Juan Valdez.

En qué se ha mejorado

Los jóvenes de la escuela rural el Callejón de Nizao creen en la capacidad que tienen sus maestros y aseguran estar satisfechos con la enseñanza que reciben. Las palabras que comparten sobre su escuela dejan ver señales de tranquilidad, porque en sus horas de estudio también reciben el desayuno, comida y una merienda escolar.

La garantía de tres comidas para la población estudiantil, en una comunidad de escasos recursos económicos ha sido posible gracias a la Jornada Escolar Extendida, una modalidad de estudio que nació de la designación del 4% del Producto Interno Bruto (PIB) a la educación dominicana, y que extendió el horario escolar, permitiendo a la comunidad escolar recibir enseñanza y alimentos.

Hoy, con sus deficiencias y elementos a mejorar, la tanda extendida puede mencionarse como un ejemplo de buenas iniciativas que han nacido gracias al 4%. Para la decana de la Escuela de Educación de la Universidad UTE, Victoria Jerez criticó que la tanda extendida que no se ha cumplido «tal y como fue concebida» para mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje, pese a que las autoridades cuentan con los recursos para desarrollar esa iniciativa a gran escala.

Puntualmente, la educación dominicana ha avanzado en términos de la remuneración al personal del ministerio de educación, en la cobertura de la educación, en la evaluación de los aprendizajes, en temas como la alfabetización y la retención escolar.  Sin embargo, Juan Valdez Analiza que la educación no puede verse de forma fragmentaria, sino, integral: “es el macro educativo el que tenemos que mejorar, no sus partes individuales”.

«Seguimos al final de la tabla de medición e incluso en algunas áreas se ve una leve caída en comparación con los países de la región, pero que puede estar explicado en que hemos sido más exitosos en el volumen de población que antes no estaban en ese nivel educativo», entiende el director ejecutivo de Acción Empresarial por la Educación (EDUCA), Darwin Caraballo.