Un año después del multitudinario asalto al Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero de 2021, centenares de procesos tanto judiciales como políticos siguen buscando a los culpables materiales e intelectuales de lo sucedido, estrechando cada vez más el cerco sobre el expresidente Donald Trump.
Las investigaciones se dividen en dos grandes grupos- por un lado, la persecución policial (encabezada por el FBI) y judicial a centenares de personas que protagonizaron actos violentos o vandálicos en esa jornada; y por otro, el proceso político abierto en el Congreso de EE.UU. contra personas de la órbita del exmandatario.
MÁS DE 700 ACUSADOS
Hasta la fecha, la Oficina del Fiscal Federal para el Distrito de Columbia ha presentado cargos contra más de 700 personas, residentes a lo largo y ancho de EE.UU., por delitos que van desde atacar físicamente a policías hasta impedir el ejercicio de sus funciones, pasando por destruir propiedad del Gobierno y entrar en un edificio de acceso restringido.