Por Julio Ravelo Astacio
Para su mejor comprensión vamos a valorar distintas definiciones: es la capacidad que tiene una persona para controlar sus propias emociones y comprender las de los que le rodean. Capacidad de motivarnos a nosotros mismos, de perseverar a pesar de las frustraciones, de controlar los impulsos, de regular nuestros propios estados de ánimo, de tener empatía y confiar en los demás.
Conviene destacar los atributos de la inteligencia emocional según Daniel Goleman: autoconocimiento, autorregulación, automotivación, empatía, habilidades sociales. Serían las más relevantes. ¿Cuáles son las emociones básicas? Entre ellas tenemos: miedo, enojo (ira), sorpresa, alegría, tristeza, asco.
¿Qué características tienen las personas emocionalmente inteligentes? Ellas son capaces de reconocer sus propias emociones, entender por qué sienten lo que sienten y, cómo esas emociones influyen en sus acciones.
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Todos hemos conocido o vamos a conocer personas cuya capacidad para enfrentar situaciones difíciles o adversidades es muy limitada e incluso desbordan con creces el conflicto y parecería que: “rota la copa se derrama el vino”.
Los borinqueños tienen una palabra específica para referirse a alguien que está incómodo, muy molesto, iracundo: “Oye, pero esta no sabe como se pone ese tipo cuando se enfogona”. Para decirlo en dominicano: “Porque cuando ese tipo se encoj… no escucha ni oye a nadie, hay que dejarle el sitio”…”dejarlo quieto hasta que se le pase su rabia”.
Muchas personas con una inteligencia privilegiada, o no tan privilegiada, no logran destacarse del todo, o lograr los objetivos deseados porque no saben controlar sus emociones. En un momento dado pueden tener una incomodidad, enojarse al extremo, perder los estribos y arruinar en unos minutos toda una vida de formación, trabajo y continuados esfuerzos.
Cualquier ser humano, en el transcurso de su vida puede sentirse mal, perder la motivación, sentirse triste, con la sensación de que encarna el fracaso. Si esto ocurre un día y se supera pronto, entenderíamos que tuvo un mal día, o tiene problemas familiares, conyugales, laborales. Si por el contrario este tipo de respuesta es una constante, entonces su inteligencia emocional debe ser revisada.
La inteligencia emocional influye en la capacidad de resolver problemas, para relacionarse con el otro, realizar trabajos en colaboración, alcanzar la autorrealización, las metas y los propósitos que se tienen en la vida.
Siempre resulta provechoso reconocer los errores cometidos y ser capaces de perdonarse asimismo para aprender de lo ocurrido.
Ordenada la azotea, priorizando nuestras obligaciones, controlando los impulsos y rectificando yerros, vamos enriqueciendo nuestra experiencia de vida y convirtiéndonos en personas más eficientes, eficaces y con vínculos más estables y respetuosos con el entorno.
¿Qué es la regla 7-38-55? Albert Mehrabian en la Universidad de California, Los Ángeles, nos dio esta regla que sostiene que la transmisión de la comunicación se puede dividir en tres partes fundamentales. En síntesis: el 7% de las personas entiende un mensaje en función de palabras elegidas. El 38% comprende al otro basándose en la entonación de su voz. El 55% juzga la información basándose en el lenguaje corporal.
Esta regla se relaciona con la comunicación de las emociones y con el transcurso de los años que pasaron desde que Mehrabian reveló su fórmula, otros aprovecharon sus principios para explicar las formas en que los humanos comunican sus sentimientos.
Tanto en la negociación formal como en la informal las señales no verbales y los movimientos corporales terminan comunicando más que las palabras. Las mismas palabras pueden tener la entonación, el timbre, la postura corporal y, los gestos probablemente sean muy diferentes, lo que revela lo que internamente estamos viviendo en cada momento. ¡Cuan relevantes son las palabras que expresa una persona para comunicar! La importancia de los gestos, movimientos, postura corporal, ritmo de la respiración, coloración de la piel y contacto visual, nos delatan. En la inteligencia emocional cerebro y corazón se dan la mano, estrechan vínculos para hacernos más preparados, listos y exitosos. La fuerza, el empuje, la velocidad de un camión no pueden ser neutralizados por los nfrenos de una bicicleta. Procuremos las palabras y los frenos adecuados para obtener excelentes resultados.