A pesar de bailar en varios escándalos, que van desde el fraude a la Lotería Nacional en 1996 y el lío de la “Pepe Card” hasta los vínculos con el caso de Quirino, una buena estrella guía los pasos del coronel Pepe Goico, quien ha salido muy bien librado de todas las acusaciones.
Tal es su suerte que fue indemnizado en el año 2019 con los salarios que había dejado de recibir desde que fue puesto en retiro en el 2004 por el entonces presidente Leonel Fernández y, además, le otorgaron una pensión de RD$70 mil.
Inconforme, llegó al Tribunal Superior Electoral (TSA) y logró que, a través de la sentencia 0030-042021, ordenara su reintegro y el pago de los salarios. Esto sucedió, sin embargo, porque el Ministerio de Defensa -el demandado- ¡pidió que se le diera la ganancia de causa a Pepe Goico!.
Al hacerlo, el Ministerio de Defensa omitió un pequeñísimo detalle: entregar los documentos que prueban que los salarios ya habían sido pagados y que él fue retirado con el rango de general de brigada (el que le correspondía por ley).
Ver esto en la República Dominicana no extraña: este es el reino de lo imposible. Lo que sorprende es que el presidente Luis Abinader parezca no enterarse y que el ministro Carlos Luciano Díaz Morfa siga en su escritorio. ¡Quién como Pepe!