La voz materna: un eco a través de generaciones

La voz materna: un eco a través de generaciones

Por Merilenny Mueses

El mes de mayo en República Dominicana se caracteriza por la celebración del Día de las Madres, llevado a cabo el último domingo de este periodo. Es una fecha que trasciende en el tiempo, uniendo corazones y encapsulando la labor de las progenitoras.

Desde incontables épocas las madres han sido pilares para la familia, siendo un soporte de amor, fortaleza y apoyo, por esto, el periódico Hoy quiere rendir homenaje a estas mujeres a través de una poesía que captura la esencia de la infancia de los niños y la presencia de su matriz en ella, a su vez invita a reflexionar sobre el rol indispensable de las madres.

La poesía «Pregúntale a tu mamá», está inspirada en la realidad de muchos niños dominicanos y se desarrolla por la experiencia de su autora, dónde la figura materna es el faro que guía y protege.

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Pregúntale a tu mamá

Por largos siglos hemos escuchado el “pregúntale a tu mamá”, me lo decía mi papá cuando le decía de ir a jugar, mis amigas cuando en mi casa se querían quedar, mi hermano cuando se enojaba y no quería verbalizar que también era su mamá.

¿Me vendes un chicle?, “pregúntale a tu mamá”, era lo que decía el de la tienda cuando dulces de más quería comprar.

“Pregúntale a tu mamá”, era lo que decía mi tía cuando a escondidas le pedía que me ponga labial.

“Pregúntale a tu mamá”, era lo que decían mis abuelos cuando les rogaba para usar más la bicicleta aunque la penumbra del anochecer entorpecía mi enfoque al pedalear.

“Pregúntale a tu mamá”, entonaban mis amiguitos cuando yung me invitaban a jugar.

“Pregúntale a tu mamá”, escuchaba día, tarde y noche.

“Pregúntale a tu mamá”, yo a mis amiguitos les decía aún más.

“Pregúntale a tu mamá”, me persiguió tanto en la niñez y adolescencia, que ahora adultez me apodero con sensatez.

Antes me imponían el: “pregúntale a tu mamá”, ahora decido que es mejor “preguntarle a mi mamá”.

Sus sabios consejos que alumbran caminos de sombras y sus cálidas caricias que me acompañan hasta en la tormenta más sórdida.

Su amor, empatía, amistad y benevolencia que se mantienen etéreos en mi vida, y aunque no merezca tanto, me los da con tanto encanto, que ahora solo pido su bienestar para siempre poder “preguntarle a mi mamá”.

Análisis de la poesía

La repetición del verso «Pregúntale a tu mamá» actúa como un mantra que recuerda la presencia e influencia de las madres en las decisiones de sus hijos y sus momentos de dudas. La metamorfosis de la niñez a la adultez plasmada en el escrito simboliza la transición de un estado de dependencia a otro de respeto y admiración.