“En este tiempo se ha hecho aún más evidente la necesidad de una vivienda digna como el refugio adecuado y fundamental para las familias”, asegura Cesarina Fabián, directora de Hábitat para la Humanidad República Dominicana; organización que centra sus esfuerzos en mejorar las condiciones de vida de familias dominicanas de bajos ingresos, a través del acceso a una vivienda digna y programas enfocados en minimizar el riesgo y aumentar la respuesta ante desastres a personas en situaciones vulnerables.
El Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat), considera que una vivienda adecuada debe proveer más que cuatro paredes y un techo. A su vez, contemplar criterios como la disponibilidad de servicios, instalaciones e infraestructura como agua potable, estructuras sanitarias adecuadas y energía, seguridad de la tenencia que garantice protección jurídica contra el desalojo forzoso, el hostigamiento y otras amenazas.
La misma también debe posibilitar la asequibilidad, habitabilidad, accesibilidad, adecuación cultural y una ubicación que brinde facilidad a oportunidades de empleo, servicios de salud, escuelas y otros servicios e instalaciones sociales.
“Una casa puede promover o limitar la salud física, mental y social de sus residentes, es por esto que, nuestra máxima prioridad en Hábitat Dominicana, es proteger a las personas y las comunidades a las que servimos, por lo cual nos encontramos fortaleciendo los programas de vivienda saludable y saneamiento. Hoy más que nunca debemos unirnos como país y trabajar en disminuir el déficit habitacional para que la mayoría de los dominicanos tengan la oportunidad de habitar una vivienda con las condiciones necesarias para resguardar su salud”, señala Fabián.
Por su parte, Celso Marranzini, quien es colaborador directo de Hábitat Dominicana, invitó a la reflexión al manifestar que todo lo que está ocurriendo es una señal más de la necesidad de que todos los hombres y mujeres tengan un lugar digno donde vivir.
“¿Cómo pedir a personas apiñadas en un cuartucho que permanezcan encerrados? ¿Cómo evitar los embarazos en adolescentes, si viven en condiciones de hacinamiento y sin privacidad los padres o pareja de la madre? ¿Cómo pretender que tengan salud? ¿Cómo pretender que puedan estudiar por más que se haga el esfuerzo de tandas extendidas, desayunos, meriendas y comidas?”, indica Marranzini en una carta pública para el presidente Danilo Medina.
Vivienda digna. Considerando el problema habitacional existente en República Dominicana, Hábitat tiene 34 años de trabajar en el país para impactar directamente en la disminución del déficit habitacional, prueba de ello son las más de 27 mil viviendas intervenidas en estos años, que se traducen a 135, 000 personas beneficiadas.
Al trabajo de Hábitat Dominicana se han unido empresas socialmente comprometidas, quienes han tenido la oportunidad de vivir la experiencia y la satisfacción social, humana y corporativa de ayudar a construir hogares seguros y dignos para mejorar e impactar las vidas de familias de bajos ingresos de la República Dominicana.
“Continuaremos trabajando fuertemente en nuestra misión de lograr un mundo donde cada persona tenga un lugar digno para vivir. En nuestro país específicamente lo haremos con un enfoque más firme en vivienda saludable y educación financiera”, finaliza Fabián.
Para obtener más información, visite el sitio web habitatdominicana.org o las redes sociales @habitatdominicana.