El Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha venido navegando en aguas turbulentas, provocada por los vientos huracanados que hoy dividen al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en sus dos facciones una encabezada por Leonel Fernández y la otra por el presidente Danilo Medina.
Desde su creación en el 2015 el PRM ha concentrado sus fuerzas en alcanzar la presidencia de una manera táctica, aprovechando cada escenario para incentivar la división del PLD.
Las estrategias iniciaron con darle al país una Ley de partido y organizaciones políticas, también la creación de la ley de régimen electoral, que ha sido un avance, para que hoy las campañas políticas empiecen a tener un poco de control.
El PRM aprovechado la división de criterio en el PLD pudo darle al país estas leyes que han venido a dar un cambio al sistema político.
Para mucho ha sido favorable la eliminación del arrastre en el tema congresual y municipal, lo que significa un avance democrático en nuestro sistema partidario, que gracias a la buena jugada del PRM podemos tenerla.
Las guerras entre Leonel y Danilo ha sido aprovechada por el PRM para sacar provecho político en acciones que favorecen a la democracia en República Dominicana, se podido ver que el principal partido ha estado enfrentando y a favor de ambas tendencias de acuerdo a la circunstancia que necesita el país.
El PRM, lucha en contra de un partido que se cree Estado. Se mantuvo firme para que una reforma no pasara en el congreso, no apoyando a Leonel, más bien defendiendo la democracia.
Hoy en un ejercicio de democracia el PRM dejo a sus legisladores votar a liberta, teniendo un resultado en contra del leonelismo dentro del PLD, lo que agudiza la división de esa organización política, cual favorece el mayor partido de oposición.
La contienda política se acrecienta rumbo a las primarias y la división que muestra el PLD debe ser aprovechada por la oposición y alcanzar la victoria en el 2020.