Leonel reta a Abinader a un debate sin límite de tiempo

Luego del debate de hace varias semanas, y cuando faltan sólo cinco días para las elecciones, el candidato presidencial del partido Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández, retó al presidente Luis Abinader a un debate sin límites de tiempo.

Fernández lanzó el reto a Abinader durante su encuentro con la prensa de cada semana, denominado La Voz del Pueblo. «Quisiéramos un debate a fondo y sin tiempo, para ver si todo lo que decimos es cierto o no», dijo el candidato de la Fuerza del Pueblo.

Durante el encuentro, Fernández presentó los datos relevantes del alto costo de la vida que impera en la República Dominicana, donde la canasta básica familiar en la actualidad cuesta en promedio, 44 mil 752 pesos, de acuerdo a los datos ofrecidos por el Banco Central de la República Dominicana, tomados por el líder político para presentar el tema.

Este gobierno está dejando un legado de gestión fracasada, indicó el candidato a la presidencia por la Fuerza del Pueblo en el conversatorio que realiza cada semana con representantes de la prensa.

Dijo que cada día es más difícil para la población más vulnerable poder cubrir sus gastos más básicos. Esto se suma al bajo crecimiento económico que ha tenido el país, que en otro encuentro Leonel había indicado es de un 1.9%.

«Ningún trabajador que gane algún salario mínimo está en capacidad de cubrir el costo de la canasta, si en el hogar hay un solo ingreso», estableció el aspirante presidencial.

De acuerdo a las informaciones recogidas, desde octubre del 2020 a diciembre de 2023, una cantidad de 288 artículos de los que consumen y utilizan las familias dominicanas, lo que representa un 79.1%, tuvo un incremento de dos dígitos.

En esa misma escala, 105 artículos, que es 36.4%, aumentó entre un 21- 30 por ciento; seguido de 96 artículos, un 33.3% de la canasta básica.

Además, Leonel Fernández expresó que la clase media se sustenta a base de endeudarse. «El crédito como mecanismo de acceso a los bienes de primera necesidad se volvió una costumbre. Las familias se endeudan hasta para comer», precisó.