Ley de tránsito es débil… y el aplicarla también

Ley de tránsito es débil… y el aplicarla también

Un típicamente trágico fin de semana por accidentes viales -una de las principales causas de muerte en todo el país- ha quedado expresamente vinculado por la propia ministra de Interior y Policía, Faride Raful, a debilidades de la ley de tránsito vigente, reacción con la que muestra sensibilidad ante el caos en la circulación y el alto costo en en vidas que llega a la sociedad. De esta forma coincide con una percepción generalizada en la opinión pública a la que, al mismo tiempo, no escapa la ostensible pasividad de autoridades ante una gama de violaciones a normas elementales que aún si una específica tipificación legal cabe perseguir a los autores y castigarlos a criterio de los jueces por comportamientos temerarios de graves consecuencias sociales que sistemáticamente cercenan vidas incluyendo las de las propios infractores. Entre un 65% y un 79% de quienes perecen en siniestros de tránsito han estado desenfrenadamente al timón de motocicletas.

Puede leer: Éxito económico de RD atrae a los estafadores

Es cierto que una ley nueva debe contemplar sanciones más severas en multas y privaciones de libertad a quienes en todo tipo de vehículos ignoren la luz roja o la prohibición de transitar en contra de la dirección autorizada, entre otras agresiones extremas; pero tratándose de violaciones masivas, como ocurre hace años, las violaciones deben ser tratadas en tribunales (en lo que llega la inflexibilidad protectora de ciudadanos) como cometidas con características agravantes que autorizarían el doble de las penas ordinarias en nombre de una sociedad que tiende a sentir lo mucho que peligra la vida al desplazarse por espacios públicos como peatones o medios de transporte. Aun cuando la ingestión de alcohol al conducir y la reincidencia en infracciones graves deberían ser motivos para suspender o anular definitivamente la licencia de conducir, ello no ocurre. Detectar embriaguez en choferes y conductores para sanciones condignas ha estado permanentemente fuera de orden aunque así lo manda la ley; y por el momento, y aunque se trata de un control que salvaría vidas, en el país está a nivel de ensayo que los agentes de la Digesett solo aplican para amistosas sesiones fotográficas. Lamentable falta de voluntad.

Más leídas