I-PREAMBULO:
Un político paradójico debe de navegar por el intrincado equilibrio entre la tolerancia, la acción colectiva y la libertad individual, con una sutil delicadeza. Defiende políticas inclusivas y establece límites firmes contra la intolerancia. Al incentivar el compromiso cívico, alinea los intereses personales con los objetivos sociales. Equilibra hábilmente las libertades personales con la equidad económica, asegurando una distribución justa de los recursos sin sofocar la libertad individual. Su enfoque es una mezcla pragmática de idealismo y realismo, y se esfuerza por crear una sociedad estable, inclusiva y eficiente.
Ahora bien, en el caso que hoy nos ocupa, existen tres Paradojas que pudieran ser aplicables al accionar del actual Mandatario de la Nación, salvando obviamente, las circunstancias atenuantes, sobre todo ante la retinué de propuestas palaciegas que hoy abruman a nuestros legisladores.
A-Paradoja de la tolerancia:
La paradoja del filósofo Karl Popper postula que la tolerancia ilimitada puede llevar a la extinción de la tolerancia misma. Si una sociedad es tolerante sin límites, su capacidad de ser tolerante puede ser arrebatada o destruida por los intolerantes.
La paradoja de Popper sugiere que si una sociedad se vuelve excesivamente tolerante sin ningún límite, puede permitir que las ideologías intolerantes se arraiguen. Estas ideologías intolerantes pueden aprovecharse de la tolerancia de la sociedad para socavar y eventualmente destruir el marco tolerante en sí. He aquí un desglose:
1)-Tolerancia ilimitada: Esto significa aceptar todos los puntos de vista y comportamientos, incluso aquellos que son intolerantes. Por ejemplo, si una sociedad tolera el discurso de odio o las prácticas discriminatorias sin restricción, puede crear una plataforma para que crezca la intolerancia.
2)-Explotación por parte de los intolerantes: Los grupos intolerantes pueden aprovechar la tolerancia de la sociedad para difundir sus puntos de vista, reclutar seguidores y ganar poder. Al hacerlo, trabajan en contra de los principios mismos de tolerancia que les permiten existir.
3)-Destrucción de la tolerancia: Una vez que las ideologías intolerantes ganan suficiente influencia, pueden comenzar a suprimir los puntos de vista tolerantes, lo que lleva a una sociedad donde la intolerancia se vuelve dominante. Esto crea un escenario donde la tolerancia inicial permitió la destrucción de una sociedad tolerante.
4)-En la práctica, Popper sostuvo que una sociedad verdaderamente tolerante debe estar preparada para defenderse de la intolerancia. Esto NO significa recurrir a los mismos métodos intolerantes, sino implementar medidas como:
a)-Restricciones legales: Hacer cumplir las leyes contra el discurso de Odio, la Demagogia y el Gatopardismo.
b)-Promover el pensamiento crítico: Educar a los ciudadanos para que reconozcan y resistan las ideologías y gobiernos intolerantes.
c)-Normas sociales: Fomentar una cultura que promueva activamente la tolerancia y la inclusión, al mismo tiempo que condene la Intolerancia, la Demagogia y el Gatopardismo
NOTA 1.: Un ejemplo histórico se puede ver en el ascenso de los regímenes totalitarios. Por ejemplo, en Alemania en la década de 1930, la tolerancia de las ideologías y los movimientos políticos extremistas permitió a los nazis ganar poder, lo que llevó a la supresión de toda oposición y al establecimiento de un régimen intolerante.
NOTA 2.: La paradoja de Popper sirve como recordatorio de que la tolerancia debe tener límites para evitar su propia destrucción. Es un equilibrio entre permitir la libre expresión y proteger los valores de una sociedad tolerante.
B-Paradoja de Olson:
La paradoja de la acción colectiva de Mancur Olson establece que los individuos, dentro de un grupo grande, pueden no trabajar, por un interés común, si los beneficios no están directamente vinculados a sus contribuciones personales. Esta paradoja puede explicar las dificultades para lograr un consenso político o una acción colectiva a favor de políticas públicas.
1-La paradoja de Mancur Olson destaca un desafío en los esfuerzos colectivos: los individuos en grupos grandes pueden no contribuir al objetivo común si sus beneficios personales no están directamente vinculados a sus contribuciones. Esto es particularmente evidente en situaciones donde los beneficios se comparten equitativamente entre todos los miembros, independientemente de su esfuerzo individual. Veamos:
a)-Problema del oportunista: En grupos grandes, los individuos pueden decidir no contribuir, asumiendo que otros harán el trabajo. Aun así, obtienen los beneficios sin participar; a estos individuos se los conoce como «Oportunistas Conchupantes”.
b)-Desajuste de incentivos: Cuando el costo personal de contribuir (tiempo, esfuerzo, recursos) supera el beneficio personal percibido, los individuos tienen menos probabilidades de participar.
c)-Bienes públicos: Los bienes públicos (por ejemplo, defensa nacional, parques públicos, sistema vial) no son excluibles ni rivales, lo que significa que todos se benefician independientemente de la contribución. Esto a menudo exacerba el problema del oportunista (contratos dolosos, cohimas,etc).
2-En esta dirección existen varios ejemplos:
a)-Acción por el cambio de regímenes fiscales: Los esfuerzos para combatir el cambio de regímenes fiscales a menudo enfrentan desafíos de acción colectiva. Si bien todos se benefician de una sociedad supuestamente más equitativa, los costos de reducir los privilegios, canonjías y los niveles del Ingreso Nominal son asumidos por la Clase Media o empresas individuales. Algunos pueden optar por no actuar, esperando que otros lo hagan, lo que lleva a una acción colectiva insuficiente.
b)-Activismo político: La participación electoral en las elecciones es otro ejemplo. Si bien el resultado afecta a todos, el voto individual tiene un impacto pequeño. Esto puede llevar a la apatía y a bajas tasas de participación.
c)-Afiliación sindical: En los lugares de trabajo, los trabajadores no sindicalizados se benefician de las mejoras salariales y de las condiciones de trabajo logradas por el sindicato sin tener que pagar cuotas sindicales ni participar en actividades sindicales.
3-Como podemos superar la paradoja de Olson:
a)-Incentivos selectivos: Brindar recompensas adicionales a quienes contribuyen a la generación de empleos, divisas y ahorro de energía.
b)-Coerción: Implementar reglas o regulaciones que requieran participación o contribución, dentro de marcos regulatorios coherentes y viables. En otras palabras, hacer cumplir las leyes para garantizar un Estado de Derecho viable y raudo.
c)-Dinámica de grupos pequeños: Los grupos más pequeños, con fuertes vínculos sociales y una comunicación clara, tienen más probabilidades de superar los problemas de acción colectiva, si se organizan en base a metas comunes y afines a sus intereses de clase.
NOTA 3.: La paradoja de Olson es fundamental para entender por qué los esfuerzos colectivos a gran escala a menudo fracasan. Destaca la necesidad de mecanismos que alineen los incentivos individuales con el objetivo colectivo para garantizar una participación efectiva y lograr intereses comunes.
C-Paradoja liberal:
La paradoja liberal del filósofo Amartya Sen muestra que es imposible garantizar la libertad individual (la capacidad de alcanzar objetivos personales) y lograr la eficiencia de Pareto, donde nadie puede mejorar sin empeorar la situación de alguien más y al mismo tiempo; también conocida como la «paradoja del liberalismo», aborda el conflicto entre dos principios clave de la economía y la filosofía:
1-Libertad individual: La libertad de los individuos para perseguir sus propios objetivos y tomar decisiones personales sin interferencias. Este es un principio central del pensamiento liberal.
2-Eficiencia de Pareto: Un estado de asignación de recursos en el que nadie puede mejorar sin empeorar la situación de alguien más. Este suele ser un objetivo en economía para garantizar que los recursos se utilicen de la manera más eficiente posible
Sin embargo, La paradoja de Sen muestra que es imposible lograr tanto la libertad individual como la eficiencia de Pareto simultáneamente. He aquí por qué:
· (*)Libertad individual: Si los individuos tienen libertad absoluta para elegir sus acciones, pueden tomar decisiones que los beneficien a ellos mismos pero que potencialmente dañen a otros, lo que lleva a una asignación ineficiente de los recursos.
· (*)Eficiencia de Pareto: Lograr la eficiencia de Pareto a menudo requiere cierto nivel de restricción de la libertad individual. Esto se debe a que asegurarse de que nadie pueda estar mejor sin que alguien esté peor puede significar limitar las opciones personales o redistribuir los recursos.
NOTA 4.: Las políticas económicas, a menudo tienen que equilibrar las libertades individuales y la eficiencia económica general. Por ejemplo, las regulaciones pueden limitar ciertas prácticas comerciales para proteger al consumidor, asegurando un uso más eficiente y sostenible de los recursos. Además, para garantizar una distribución justa de éstos recursos es posible que sea necesario limitar algunas libertades, como la imposición de impuestos progresivos para financiar los servicios públicos dirigidos al aumento de los puestos de trabajo.
Conclusión: La paradoja liberal de Sen pone de relieve la tensión inherente entre el deseo de libertad individual y la necesidad de una sociedad eficiente y equitativa.
Se trata de una cuestión fundamental en la teoría política y económica, que requiere una consideración cuidadosa para equilibrar estos objetivos en pugna.
II-Exploremos cómo interactúan y se influyen mutuamente estas tres paradojas:
Tal y como lo expuse anteriormente, la paradoja de la tolerancia de Karl Popper sugiere que la tolerancia ilimitada puede llevar al surgimiento de grupos intolerantes, que podrían destruir la sociedad tolerante. Además, la paradoja de Mancur Olson destaca el desafío de motivar a los individuos en grupos grandes para que trabajen en pos de objetivos comunes, especialmente si los beneficios personales no están directamente vinculados a las contribuciones. En una sociedad tolerante, esto podría significar que no hay suficientes personas dispuestas a oponerse activamente a los grupos intolerantes. En lo concerniente a la paradoja liberal de Amartya Sen, esta ilustra la tensión entre la libertad individual y el logro de la eficiencia económica.
De ahí que, en una sociedad altamente tolerante, garantizar la libertad individual podría entrar en conflicto con la necesidad de limitar las libertades para mantener la armonía social y el equilibrio económico. Aquí es donde interactúan estas tres paradojas:
1-Una sociedad que practica la tolerancia ilimitada podría tener dificultades con la paradoja de Olson. Las personas pueden ser reacias a actuar contra las conductas intolerantes porque el costo personal de oponerse a la intolerancia puede ser alto. Esta falta de acción colectiva podría permitir que la intolerancia crezca sin control.
2-La paradoja liberal de Sen señala la dificultad de equilibrar las libertades individuales con la eficiencia social. En una sociedad tolerante, las personas pueden explotar sus libertades para promover opiniones intolerantes, amenazando así la estructura misma de la tolerancia. Esto crea una necesidad de límites a ciertas libertades para prevenir la intolerancia, lo que afecta directamente la libertad individual.
3-Lograr la acción colectiva a menudo requiere cierta restricción de la libertad individual para alinear los incentivos personales con el bien común. En el contexto de la tolerancia, garantizar la acción colectiva para oponerse a la intolerancia puede requerir limitar ciertas libertades (por ejemplo, prohibir el discurso de odio), lo que se relaciona con la paradoja liberal de restringir la libertad para lograr una eficiencia social más amplia.
En resumen, una sociedad altamente tolerante debe sortear la paradoja de Olson incentivando la acción colectiva contra la intolerancia, lo que puede implicar limitar algunas libertades individuales, como se describe en la paradoja liberal de Sen. Estas restricciones son necesarias para mantener un equilibrio entre preservar la tolerancia, garantizar una acción colectiva eficaz y optimizar la eficiencia económica y social.
Por lo tanto, estas paradojas están entrelazadas, lo que pone de relieve la compleja dinámica entre la tolerancia, la acción colectiva y la libertad individual para mantener una sociedad cohesionada y funcional. Equilibrar estos elementos es una tarea llena de matices que requiere una consideración cuidadosa y la formulación de políticas estratégicas.
III-CASO DE LUIS RODOLFO ABINADER CORONA(LRAC)
Describir a un político a través de la lente de estas tres paradojas puede ser bastante revelador. El accionar reciente de nuestro presidente me ha motivado desarrollar este tema y, en lo posible, tratare de posicionarlo en este triangulo paradójico.
1-Un político consciente de la paradoja de la tolerancia comprendería la necesidad de equilibrar la libertad de expresión con la protección de los valores sociales. Podría defender políticas que promuevan la libertad de expresión, pero también imponer límites al discurso de odio y las acciones que amenacen la armonía social.
Este político se esforzaría por crear una sociedad inclusiva mientras se mantendría alerta contra el aumento de ideologías intolerantes. Creo que en este campo, LRAC ha actuado muy inteligentemente.
Sin embargo, creo que sufrió un desliz de exceso de pragmatismo al enviar las tres propuestas (Laboral, Fiscal y Constitucional) al mismo tiempo, al Congreso.
2-Un político debería reconocer los desafíos de movilizar a grandes grupos para la acción colectiva. Podría centrarse en crear incentivos para la participación, como exenciones impositivas para el servicio comunitario o reconocimiento público para el compromiso cívico. Trabajaría para alinear los intereses individuales con el bien común, asegurando que las personas vean beneficios tangibles de sus contribuciones a los objetivos sociales. Aquí, LRAC perdió la perspectiva al no concitar, previamente, el apoyo y auspicio de la Clase Media, ANTES de enviar esos proyectos al Congreso.
3-Al navegar por la paradoja liberal, este político buscaría un equilibrio entre las libertades individuales y la eficiencia social. Podría apoyar políticas que protejan las libertades personales y al mismo tiempo implementar regulaciones que aseguren una distribución justa de los recursos y la estabilidad económica. Esto podría implicar impuestos progresivos, redes de seguridad social y medidas para prevenir monopolios y asegurar una competencia justa. Estos aspectos, LRAC parece que las paso por alto al formular sus propuestas fiscales, laborales y constitucionales, dentro de un marco regulatorio que atenta contra la paz social y l Canasta Básica.
IV-SINTESIS
Un político que entienda estas paradojas sería pragmático y matizado en su enfoque.
Abogaría por la tolerancia pero establecería límites claros para proteger los valores sociales.
Crearía incentivos y estructuras para alentar la acción colectiva y la participación cívica.
Equilibraría las libertades individuales con políticas que promuevan la equidad económica y social.
Un político así sería un experto en navegar por las complejidades de la gobernanza, asegurando que sus políticas sean justas y efectivas para promover una sociedad estable e inclusiva.
Lo anterior, es indispensable para la garantizar la estabilidad macroeconómica de nuestra nación. No hacerlo, es continuar con el actual proceso de descontento social, que puede ocasionar eventos no cívicos y plagados de incertidumbre.