Con motivo del Día Mundial del Lupus cerebrado el pasado lunes 10 de mayo 2021, compartimos recomendaciones de alimentación y modificación del estilo de vida en personas que viven con esta condición.
No existe una dieta específica ni antiinflamatoria que prevenga o trate exclusivamente el lupus, como sucede con otras enfermedades crónicas (hipertensión y diabetes mellitus). Se recomienda una alimentación balanceada, saludable y que contenga variedad de vegetales, frutas, cereales enteros, lácteos bajos en grasas y un consumo moderado de carnes.
Es importante mantener un peso saludable por lo que dentro de las recomendaciones alimentarias estan las de consumir fuentes de proteinas bajas en grasas, meriendas bajas en calorías, leer las etiquetas nutricionales de los alimentos, mantener registro de comidas, tener un horario de alimentación establecido y mantenerse activo.
Es beneficioso el consumo de alimentos que contienen ácidos grasos esenciales como el omega 3 que se encuentran en pescados grasos – salmón, trucha y sardinas- las nueces y linaza, que puede proteger contra enfermedades vasculares en especial en mujeres con lupus que tienen un riesgo mayor.
El patrón de la dieta Mediterránea – basada en el consumo de frutas, vegetales, nueces, granos y pescados en conjunto con ácidos grasos monoinsaturados como el aceite de oliva extra virgen – puede ser beneficiosa contra enfermedades crónicas, con estrés oxidativo e inflamatorias.
Nutrientes como la vitamina D pueden estar deficientes y tendría que ser evaluados si es necesario suplementar, pero siempre con su médico para evitar consumo excesivo y daños a la salud.
Mantener un registro de los alimentos que se consumen cada dia y el efecto que causa es una buena técnica para evitar los que podrían causarle malestar a algunas personas. Aunque no existen alimentos específicos que causen brotes de lupus, se ha visto que algunos alimentos afecta negativamente a algunas personas.
En cuanto a mejorar hábitos de estilo de vida, es necesario realizar actividad física para ayudar tener buena salud y evitar el aumento de peso. El tipo de ejercicio dependerá de la condición física y lo que le sea permitido por su médico. Algunos ejercicios recomendados, ya que no ponen mucha presión sobre las articulaciones, son elíptica, caminadora, natación y movimientos de flexibilidad como Tai Chi y Yoga según sea cómodo para la persona. La alimentación y actividad física, sumada a la reducción de estrés y el descanso, podrían tener muchos beneficios en personas viviendo con Lupus por lo que vale la pena intentarlo.