«Mi hijo se fue a trabajar el viernes. Yo le esperaba con vida, no en una caja», manifestó la madre del raso Leonardo Báez Valdez, fallecido mientras estaba ingresado en un centro de salud tras ser herido por un supuesto enajenado mental que lo atacó con un machete, hecho ocurrido el pasado 23 de diciembre en Villa Mella.

«Con el alma destrozada», la progenitora narró que ella y su hijo, quien deja una niña de dos meses en la orfandad, tenía varios proyectos de vida, entre ellos crear un «negocito».

«Estábamos haciendo muchos planes él y yo (…) ¿Cómo él me dejo el día de hoy? yo no lo esperaba así», expresó la fémina mientras eran velados los restos del oficial de la Policía Nacional, que fue sepultado este miércoles en el cementerio Cristo Salvador.

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Mientras que el padre de la víctima le solicitó a las autoridades implementar medidas que eviten este tipo de tragedias.

«Nosotros le pedimos a todos los militares, así como al Gobierno, que hagan algo con esas personas que andan en las calles quitándole la vida a gente humilde y trabajadora«, dijo.

Se recuerda que el raso Báez Valdez de 26 años, y su compañero del mismo rango, Carlos Manuel Urbáez Mateo, de 20, fueron atacados por el enajenado mental identificado como Junior Mercedes Núñez (34), cuando ambos agentes patrullaban por la citada zona en la unidad motorizada que tenían asignada para sus labores preventivas.

En el hecho, el agente (fallecido) sufrió amputación de su mano derecha y herida en el glúteo derecho, mientras que su compañero también resultó con herida cortante en su brazo derecho, con posible lesión vascular.

Fueron en esas circunstancias que el primero, al defenderse de la agresión, tomó su arma de reglamento y le ocasionó a Mercedes Núñez (agresor) las heridas que le provocaron la muerte.

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