Por estos días es tendencia un sujeto popularmente conocido como “Mantequilla”, oriundo de la provincia Monte Plata, específicamente del municipio de Sabana Grande de Boyá. Quien dió el salto a la fama luego de la advertencia que realizare el Superintendente de Bancos sobre los riesgos del modelo de negocio.

Este caballero, de nombre Wilkin García Peguero, ha estado desarrollando un negocio “innovador” (según las palabras del propio autor) que ha denominado 3.14. Consiste en una “fórmula” secreta, que de manera rápida y sin lógica razonable, para los ciudadanos de a pie y, mucho menos, para los expertos en finanzas y áreas afines, “multiplica” el dinero de los inversionistas, sin el más mínimo esfuerzo, sin empresa, sin estructura, sin producto o servicio, tangible o intangible, para la comercialización o inversión… ¡sin nada!. Superando “mantequilla” las hazañas del inolvidable Houdini.

El popular y autodenominado “Albert Einstein dominicano” fue entrevistado por Santiago Matías, allí informó que no podía revelar su “código”, bajo el argumento de que pudiese crear un caos social y poner en riesgo la estabilidad económica nacional e internacional, ¡modestas declaraciones!, agregó, que sus inversiones han “caído” gracias al impacto negativo de las autoridades, excelente excusa para quebrar, ¿Cierto?.

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Considero importante aclararle a “mantequilla” que sus superpoderes no afectarán “la estabilidad nacional o internacional”; lo que si ha generado es un caos que se complicará más en la misma proporción en que las autoridades profundicen y, peor aún, que las inversiones sigan supuestamente “congeladas” o “cayendo”.

Hoy “mantequilla” es un líder y charlista sobre finanzas y emprendimiento, al menos así se aprecia en un video donde se ve orientando a niños de una escuela; No sé qué es peor, si la formación del charlista o la mediocridad del director que le dio el acceso. Lo que sí le debemos agradecer es que ha puesto en evidencia una vez más la ausencia pensamiento crítico en nuestra población, vulnerable a engaños.

Otro aspecto improcedente, a mi entender, fue la forma en que se realizó la advertencia a la población, por Twitter y en la cuenta personal del superintendente, lo que nueva vez, hago el señalamiento de la investidura de los cargos y su debido manejo. La relevancia del caso, sea o no delito oficial, ameritaba agotar el debido proceso, iniciando la solicitud de investigación por las autoridades competentes y, a la vez, un comunicado institucional sobre los riesgos de los negocios informales, pues lo que se ha producido es un circo mediático que ha popularizado al individuo entre bromas y burlas, y llegando a producirse un tu a tu entre el funcionario y el “Warren Buffett” dominicano, desvirtuando el enfoque de la función pública.

Las autoridades informan que han iniciado las investigaciones del “admirable” mago inversionista. Esperamos una rápida respuesta de un negocio que a todas luces denota irregularidad.

¡A toda mantequilla le ha de llegar su tostada caliente!