Washington. A pesar de los intentos del presidente Donald Trump para revocar el «Obamacare», más de 600.000 personas se registraron en el programa en la primera semana de inscripciones, informó el gobierno el jueves.
Con datos de solo cuatro días, los expertos indicaron que resulta difícil discernir una tendencia. Sin embargo, la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA por sus siglas en inglés) no parece estar colapsando, al contrario, las inscripciones para 2018 van por el mismo camino que en años anteriores.
Las cifras de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid de Estados Unidos mostraron que 601.462 personas se inscribieron del 1 al 4 de noviembre en los 39 estados que cuentan con los servicios del sitio de internet federal HealthCare.gov.
De esas miles de personas, alrededor del 77% renovaron su cobertura y cerca de 23% son nuevos clientes, cifras que asemejan a las de años anteriores.
Debido a que las inscripciones para los estados que tienen sus propios mercados de seguros de salud no están incluidas en los datos preliminares, la inscripción nacional general será más alta.
«Es bastante claro que la ACA sigue funcionando, y lo hace razonablemente bien», dijo Larry Levitt de la Fundación de la Familia Kaiser.
Las inscripciones aumentan a diario, señaló Levitt, «pero estos números no necesariamente indican si el registro está aumentando o disminuyendo».
La Ley de Cuidado de Salud Asequible. promulgada durante el gobierno del expresidente Barack Obama, ofrece seguros de gastos médicos privados subsidiados por el gobierno a aquellas personas que no cuentan con un seguro de salud por parte de su trabajo.
Los números de personas inscritas este año son observados de cerca debido a que el gobierno del presidente Trump menosprecia al programa.
Trump ha publicado reiteradamente en Twitter que el Obamacare está colapsando o desmoronándose. De forma abrupta detuvo los pagos que reembolsaban a las aseguradoras por ofrecer copagos y deducibles más bajos a las personas con menos ingresos, lo que contribuye a un aumento en las primas.
Su gobierno redujo el tiempo de inscripciones a la mitad, así como el presupuesto publicitario y recortó a los asesores que ayudan a los consumidores a inscribirse.