Hace una semana Nicole Iglesias tenía un resfriado común, tomaba medicinas para la tos y dolor de garganta, y no se imaginaba que este miércoles iniciaría su tercer día de aislamiento domiciliario- tiene COVID-19.
“Al principio me sentí muy culpable porque he podido contagiar a otras personas”, dijo Nicole desde la habitación de su casa familiar en Ciudad de Panamá, en una entrevista telefónica con Efe.
Iglesias forma parte de los 71 afectados que deben de estar 14 días en aislamiento domiciliario en Panamá, país que registra 86 contagios confirmados, incluido el único fallecido.
Otros 14 pacientes se encuentran hospitalizados, 6 en situación “moderada” y otros 8 en la unidad de cuidados intensivos.
La joven, “panameña 100 %” como según ella misma se define, no entra en el llamado “grupo de riesgo” – que conforman los adultos mayores o personas con patologías previas- pues solo tiene 20 años.
Su pecado fue viajar a Europa durante las vacaciones de carnavales entre mediados de febrero y principio de marzo, coincidiendo con el repunte del virus en el continente.
Estuvo 3 días en Italia y 8 en España visitando a su hermana que estudia en Pamplona. Ambos son dos de los países con más casos reportados y alta tasa de mortalidad- 2.978 fallecimientos, y 13.716 casos y 598 muertos, respectivamente.
SENTIMIENTO DE AGOBIO
A Nicole le diagnosticaron COVID-19 el domingo pasado en un hospital privado de la capital en el que trabaja su madre, tras sentir malestar general durante más de 10 días. En concreto, “desde que estaba en el avión de Madrid en dirección Panamá».
“Sentí mucho agobio y me eché a llorar del estrés cuando el test dio positivo” y lo que vino después fue “el sentimiento de culpabilidad”, añadió.
La primera reacción de su familia fue tranquilizarla- “te vas a recuperar”, le dijo su madre inmediatamente.
Ahora asegura de que se encuentra bien anímicamente, sigue con sus clases virtuales para continuar su carrera de mercado y comunicación de modas, y siempre está en continua comunicación con sus amistades.
AISLAMIENTO TOTAL
Entre risas, Nicole comenta a Efe que la vía para comunicarse con su familia es solo por vídeollamada, a pesar de vivir en la misma casa- “Llamo a mi padre y me deja la comida en la puerta».
“Mi familia toma todas las medidas, incluso mi madre limpió toda la casa con alcohol…. aunque le haya fastidiado sus muebles”, declara la paciente con la voz tocada.
El Ministerio de Salud aún no ha realizado ninguna prueba de coronavirus a su familia, así como tampoco ningún funcionario ha visitado a Iglesias en su casa.
“Creo que ellos (las autoridades de Salud) están en contacto con mi mamá, porque yo hago un reporte diario”, añadió.
A pesar de ello, Iglesias recalcó que el Gobierno si está “tomando las medidas adecuadas”, y está actuando rápido. “Quizás el resultado de las pruebas sí se estén retrasando, pero las acciones son las correctas”, especificó.
El Gobierno decretó el viernes pasado la emergencia nacional por el coronavirus y ordenó el cierre de negocios de ocio, prohibió los eentos deportivos y culturales masivos, y ha pedido a las personas que permanezcan en sus casas.
En Panamá están suspendidas las clases, así como los vuelos procedentes de Europa y Asia y la entrada de extranjeros.