El Merca Santo Domingo, que originalmente iba a ser un mercado de mayoristas y cuyo principal pabellón estaba reservado a los productores agrícolas y pecuarios para exhibir y vender su producción al por mayor, luce arrabalizado por los tarantines que hay.

Esa área está llena de cubículos con diversos productos agrícolas al granel, que da la impresión de que uno llegó al “Mercado Nuevo de la Duarte”, que desde hace años es un desastre. Ahí las ventas son al detalle y a veces al por mayor, en especial, los víveres.

Tan buen proyecto el de Mercados Dominicanos de Abasto Agropecuario (Mercadom), mejor conocido como el Merca Santo Domingo, que tiene su origen en un programa del Ministerio de Agricultura, creado mediante resolución en el 2002, denominado Programa de Mercados, Frigoríficos e Invernaderos (Promefrin), cuyo primer director ejecutivo fue Eusebio Guzmán.

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Con Promefrin pudo haberse resuelto el problema más grave que tiene la producción agropecuaria nacional, que es el de la comercialización, con un mercado mayorista y una red de mercados minoristas que se surtirían ahí y también se harían exportaciones. En el plan de los mercados, se construirían otras unidades en algunas provincias, como Santiago, Duarte y La Vega.

Origen del Merca

La idea del mercado de mayoristas y sus mercados minoristas, que sería tres según las construcciones del gobierno, fue traída al país por un lobista español (ya fallecido) en el gobierno de Hipólito Mejía (2000-2004) y estuvo a cargo de la Secretaría de Agricultura (hoy Ministerio), con Eligio Jáquez como secretario.

Ese proyecto se ejecutó con un préstamos del Deutsch Bank y la Compañía Española de Seguros de Créditos de Exportación por unos US$139 millones (US$65 millones para el Mercado de Mayoristas de Santo Domingo, US$38 millones para los frigoríficos y US$36 millones para los invernaderos).

Los tres mercados se construyeron: uno en Cristo Rey, otro en Villas Agrícolas y el otro en Villa Consuelo. Hubo muchas dificultades para poner a funcionar esos centros de expendio de alimentos al detalle, los cuales se iban a abastecer del Merca Santo Domingo, pero por la distancia (kilómetro 22 de la autopista Duarte) se han abastecido del mercado Nuevo de la Duarte.

Inauguran Merca

El Merca fue inaugurado unos 10 años después de iniciada su construcción en 2002 (gobierno de Mejía), por el presidente Leonel Fernández, el 6 de junio de 2012, a un costo de más de RD$5,000 millones, a través de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado. La puesta en funcionamiento de ese mercado le tocó al gobierno que encabezó Danilo Medina, quien promulgó la ley de Mercadom y la mandó a modificar para darle participación a la Alcaldía del Distrito Nacional, en el manejo de los tres mercados detallistas y los que se construyeran en el futuro. En el Merca hay ventas al por mayor, pero no en el volumen que se esperaba.

El mercado de la Duarte iba a ser desarrabalizado para remodelarlo y convertirlo en un mercado de ventas al detalle y todos los mayoristas se irían al Merca, pero al pasar de los años se han quedado en los dos lugares. El desastre del Mercado de la Duarte sigue casi igual que antes.

Mercados detallistas

De los tres mercados detallistas que se surtirían del Merca hay dos abiertos al público y el otro está cerrado, vuelto un desastre. Funcionan con ventas al detalle los mercados de Cristo Rey y de Villa Consuelo, que es el que está mejor organizado y más limpio, aunque hay algunos meseros con mercancías en el suelo. En el segundo piso del Mercado de Cristo Rey hay 41 locales para igual cantidad de comerciantes de la calle 41 para facilitar el tránsito de vehículos, pero siguen cerrados debido a que no les ha interesado. Esos comerciantes siguen en la calle 41 obstaculizando el tránsito.

Se recuerda que para poner a funcionar en distintas fechas, el Merca y los dos de los tres mercados detallistas se libraron varias batallas con los mayoristas del Mercado Nuevo de la Duarte y la Alcaldía del Distrito Nacional, cuyo alcalde era Roberto Salcedo.

Cazadores

Como el Gobierno se estaba dilatando para poner a funcionar el Merca, a través del Ministerio de Agricultura, en el gobierno de Danilo Medina salieron a flote los cazadores de fortunas interesados en esa infraestructura millonaria. Le propusieron al Gobierno que se la arrendara con opción a compra. El grupo de empresarios que quería el Merca ya había adquirido dos frigoríficos de ese mercado, mediante arrendamiento a precio de “vacas muertas” (casi regalado).

Ese grupo propuso a la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD) que lo acompañara en ese negocio, con una participación de 50-50, pero el Consejo de esa institución rechazó la propuesta, por tratarse de un bien dirigido a beneficiar a los productores agropecuarios del país.

Hasta entonces, los productores agropecuarios albergaban la idea de que con el Merca Santo Domingo se resolvería el problema de la comercialización de los productos agrícolas y pecuarios, que en la mayoría de los casos los agricultores y los ganaderos siguen cargando los platos rotos, junto a los consumidores, porque los que comercializan continúan ganándose la loma en lo llano, con la barrigota alta, como el que vendió al contado.