El nuevo obispo de la Diócesis de Baní, monseñor Faustino Burgos Brisman, llamó a los ciudadanos de Peravia, San Cristóbal y San José de Ocoa a cooperar en el cuidado y protección de la biodiversidad de las tres provincias.

Al ser instalado el sábado como el cuarto obispo de la Diócesis de Baní durante una eucaristía en la que asumió el compromiso de trabajar en comunión con todos, el también secretario general de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) afirmó que apoyará a las organizaciones culturales, ecológicas, educativas y sociales en la búsqueda de soluciones a los problemas que aquejan a la jurisdicción.

Puede leer: Instan al empresariado a priorizar la mano de obra nacional

“Colaborar en la confección de un plan estratégico de desarrollo de las tres provincias que componen nuestra diócesis es una necesidad. Nuestra diócesis tiene una gran biodiversidad que hay que cuidar y proteger. En esta tarea todos tenemos que cooperar”, afirmó monseñor.

Indicó que prestará una atención especial y continuará reforzando el trabajo dedicado al clero, la familia, la juventud y las distintas pastorales de la Diócesis.

La misa, realizada en la Plaza de la Cultura Joaquín Incháustegui, contó con la presencia de la vicepresidenta Raquel Peña y el Nuncio Apostólico, monseñor Piergiorgio Bertoldi. Además participaron obispos de la CED, obispos y sacerdotes internacionales, presbíteros, diáconos, consagrados y cientos de laicos, así como autoridades civiles y militares. Su primer decreto consistió en el nombramiento del nuevo vicario general, el padre Samuel Casilla.

Un poco Sobre Monseñor

Nacido el 15 de febrero de 1960 en San Francisco de Macorís, estudió Filosofía en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) y Ciencias Religiosas en el Seminario Pontificio Santo Tomás de Aquino (SPSTA). Fue ordenado presbítero el 30 de mayo de 1987 y pertenece a la Congregación de la Misión fundada por San Vicente de Paúl. Fue obispo auxiliar de Santo Domingo.