El maestro de generaciones de locutores Juan Nova Ramírez murió hoy tras padecer problemas cardíacos.
Nova Ramírez se desempeñó por varios años como director de la Escuela Nacional de Locución Profesor Otto Rivera (ENL-POR).
«Se ha extinguido una voz…una brillante voz de la locución dominicana…maestro, padre, amigo… Resquiescat in pace», compartió la ENL a través de su cuenta de Instagram.
Nova Ramírez también participó en narraciones deportivas por décadas.
Su carrera como narrador deportivo comenzó en 1968 cuando el boxeador dominicano Carlos- Teo- Cruz le dio al país la primera corona mundial. Más adelante trabajó en las transmisiones de radio y televisión de los XII Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe Santo Domingo 1974. Meses después en los partidos del básquet superior en el Palacio de los Deportes en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
También fue al Campeonato Mundial de Baloncesto en 1978 como narrador, junto a Andrés Vanderhorts, Guelo Tueni y Leandro de la Cruz.
“La locución comercial ha sido mi vida y eso lo heredé de un tío materno que aunque no brilló como tal, me inculcó para que la tomara de profesión”, dijo Nova Ramírez entrevistado por el periodista de HOY José Cáceres, en el 2008.
En el 1981 entró a laborar con Moncho Imbert en la cadena de los Leones del Escogido junto a Roosevelt Comarazamy, Billy Berroa y Félix Acosta Nuñez.
Años más tarde fue contratado por los hermanos Jhonny y Ramón Naranjo, ambos fallecidos, dos prominentes cronistas deportivos, para trabajar en la cadena de las Estrellas Orientales en San Pedro de Macorís como voz comercial.
“Fue una bonita estadía en Macorís, ya que la gente era muy cariñosa y se identificó rápido con nosotros, y eso me hizo sentir bien”, manifestaba Nova Ramírez y apuntaba que siempre lo acompañaba su hijo, Juan Nova Junior, hoy comentarista y editor deportivo.
Tras varios años en el Estadio Tetelo Vargas, en San Pedro de Macorís, nueva vez, Ramón y Jhonny Naranjo le hacen una oferta y lo firman para trabajar a partir del 1990 con los Tigres del Licey en la cadena de televisión, hasta la actualidad, como voz comercial.
«El estadio Quisqueya es como mi casa», llegó a expresar el profesor Nova Ramírez aludiendo a que cada año, al comenzar y desarrollarse la temporada de pelota invernal, era seguro escuchar su voz en las transmisiones.