Hoy es el último día de octubre y, aunque las brujas no tienen el poder de asustarnos, inicia un mes de angustia para las familias que viven en la calle La Esperilla de Los Restauradores: pese a que llevan desde abril solicitando que les limpien un imbornal ubicado en la esquina de la calle 5, la Alcaldía del Distrito Nacional los ha ignorado (reporte 29604).
Con dos noviembres viendo sus casas anegadas a unos niveles terribles, los vecinos sienten miedo al ver que llega un nuevo noviembre, hay lluvias anunciadas, pero aún no destapan el imbornal.
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En mayo alguien les explicó que ya que habían solicitado a la Dirección de Limpieza de Filtrantes que les dieran asistencia lo más pronto posible. El día 7 de noviembre hará seis meses de aquello.
Ver el vídeo de una de las casas (la 21) mientras se inunda con aguas negras me llevó a escribir estas líneas porque, mientras llega una nota diciendo que la “alcaldesa Carolina Mejía activa el Comité de Prevención, Mitigación y Respuesta por lluvias”, los vecinos oran para no volver a perder parte de sus propiedades por culpa de la indolencia del personal de la alcaldía. Como ellos, podría haber otros vecinos que miren hacia el cielo y sientan pavor al ver las nubes negras. Ojalá que este noviembre no vuelva a dolerles.