El primer ministro haitiano, Garry Conille, aseguró que su país está volviendo «poco a poco» a su normalidad, mientras las fuerzas del orden mantienen una lucha activa contra la delincuencia protagonizada por las pandillas armadas.
El funcionario compartió en sus redes sociales imágenes de un recorrido que hizo por la zona conocida como Campo de Marte, en el centro de Puerto Príncipe, un área próxima al Palacio Nacional haitiano.
Hace varios días, el gobierno de Haití extendió el estado de emergencia a todo el país poco antes de la llegada a Puerto Príncipe del secretario de Estado de EE.UU, Antony Blinken, quien se reunió con Conille, para discutir «los próximos pasos en la transición democrática de Haití».
Un portavoz de Conille, que asumió el gobierno interinamente el 3 de junio, anunció el miércoles a la prensa local que la medida, que regía desde marzo pasado en el departamento del Oeste, donde está enclavada la capital, y luego fue extendida a otras áreas para combatir la violencia de las pandillas, está vigente ahora en todo el territorio haitiano con el mismo objetivo.
Desde junio han sido desplegados en Haití 400 policías kenianos como parte de una Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS), que cuenta con el apoyo material y financiero de Estados Unidos y Canadá, y tiene como objetivo restablecer la seguridad y el orden en un país en crisis en todos los ámbitos.
Blinken es esperado hoy en Puerto Príncipe, donde tiene previsto reunirse con el primer ministro interino, Garry Conille, y con el Consejo Presidencial de Transición, y conocer la base principal de la MMS.