Hablando de gripes y resfriados es bien conocido que muchas personas tienden a enfermarse en las épocas de otoño e invierno, o en los días de lluvia y frío para los países cercanos al Ecuador.
Durante esos períodos son muy comunes los estornudos, fiebre, ausencias del trabajo por un día de cama y algunas dolencias más.
Lo anterior no quiere decir que todo el mundo tenga que enfermarse porque haga frío o por unas gotas de lluvia.
No he realizado un estudio al respecto, pero es muy conocido que puedes prevenir la gripe y los resfriados si haces ejercicio, descansas, te nutres adecuadamente, consumes tus proporciones recomendadas de vitaminas, minerales y antioxidantes, además de un consumo adecuado de frutas y vegetales que te aporten un buen contenido de fibra.
Como bien dijo el químico francés Louis Pasteur, «El microbio no es nada.
¡El terreno lo es todo!». Si nuestro cuerpo está mal alimentado, no recibe los nutrientes esenciales necesarios para que trabaje adecuadamente y, además, está intoxicado, es más probable que los virus y microbios ataquen con mayor éxito que un terreno que ha sido cuidado, presenta un buen sistema intestinal y está desintoxicado.
El resfriado es causado por numerosos virus (principalmente rihnovirus, coronavirus y también ciertos ecovirus y coxsackievirus) que infectan el sistema respiratorio superior. Estos virus se transmiten de persona a persona a través de pequeñas gotas de saliva que se expelen al toser, hablar o durante los estornudos.
Las gotas son inhaladas directamente o, más frecuentemente, se transmiten de mano en mano mediante saludos.
Importante
No recibas virus ajenos
Apretones de mano u objetos como los llavines de las puertas, pueden contagiarte distintos tipos de virus.
El resfrío y muchas otras enfermedades biológicas, se incrementan con los cambios de temperatura, es decir lluvias, viento o frentes fríos.
Razón
En nuestro tracto respiratorio el moco presente allí es desplazado por cilios que actúan continuamente llevando el moco (lleno de virus y bacterias que éste ha impregnado y atrapado) a dos vías diferentes:
– El estómago para luego ser degradado por enzimas y ser eliminado vía fecal.
– Nariz o boca para ser expulsados mediante estornudos, tos o escupir.
La razón reside en que en épocas invernales el movimiento rítmico acelerado de los cilios (que se produce en verano-primavera) disminuye en presencia del frío del otoño-invierno, dando más tiempo a los virus y a las bacterias para pasar a través del moco y lograr infectar células corporales.
Se suma a que las aves migratorias, importantes vectores de los virus desde el otro hemisferio; dejan una estela de virus en el aire, favoreciendo la aparición de epidemias.
Si te gusta bañarte bajo la lluvia o sencillamente te agarró un aguacero, sin paraguas, entonces, procura secarte lo antes posible, pues no solamente es probable que te resfríes, sino que te contagies de otros virus ambientales.