Orlando.— El príncipe Enrique de Inglaterra y la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, participaron el domingo en la inauguración de los Invictus Games para veteranos de guerra heridos, junto a otras figuras del deporte, el entretenimiento y la política en una ceremonia brillante.

El cantante británico James Blunt y la soprano Laura Wright actuaron durante el evento de dos horas celebrado en Orlando, Florida. El actor Morgan Freeman y el expresidente de Estados Unidos George W. Bush — presidente de honor de esta edición de la competición — estuvieron entre los asistentes a la ceremonia de apertura de los juegos en el ESPN Wide World of Sports Champion Stadium. A partir del lunes y durante cuatro días, casi 500 deportistas de 14 países distintos participarán en la competición paralímpica.

Los Invictus Games son una idea del príncipe Enrique, que se inspiró en la ayuda a los militares heridos y a sus familias tras sus dos turnos en Afganistán con el ejército británico. La primera edición de los juegos se celebró el año pasado en Londres. “No puedo expresar lo orgulloso que estoy de tener la segunda edición de los Invictus Games en América”, dijo el príncipe Enrique. “Esta noche estoy muy lejos de Londres, pero cuando miro veo tantas caras conocidas, de hombres y mujeres, sus amigos y familias y todos los que les han traído hasta aquí, me siento como en casa”. La noche comenzó con los participantes, vestidos con los colores de sus países, entrando al estadio Champion Stadium ante la ovación de la grada.

El acto incluyó varias actuaciones musicales y tres veteranos hablaron sobre las lesiones que sufrieron y sobre su lucha por recuperar el control de sus vidas. “Serví junto a soldados de todo el mundo”, dijo el príncipe Harry. “Vi los sacrificios que ustedes y sus familias hicieron para servir a sus países. Aprendí sobre la importancia del trabajo en equipo y la camaradería en la forma en que solo el servicio militar puede enseñar”. Aviones militares sobrevolaron el recinto y la bandera amarilla y negra con el logo “I Am”, el símbolo de la competición, llegó al estadio en helicóptero.

La inauguración contó además con un espectáculo de pirotecnia. “Es un verdadero honor estar aquí esta noche para ayudar a inaugurar esta edición de los Invictus Games”, dijo Michelle Obama, que intervino casi al final de la ceremonia. “Quiero, por supuesto, comenzar dando las gracias al príncipe Enrique por su destacado liderazgo y por traer los Invictus Games a Orlando. Él es realmente nuestro príncipe azul. Debería estar orgulloso de su trabajo”.