Si el presidente de la República, Danilo Medina, acoge las recomendaciones del Comité de Gestión Sanitaria para Combate COVID-19, de no pasar a la Fase 3 de desescalada progresiva por el aumento de contagios registrado en los últimos días, impactaría en forma negativa a sectores considerados motores de la economía nacional, al posponerse una vez más la entrada en operaciones de sus actividades.

Para esta fase 3, que tenía previsto iniciar el 17 de junio, pero que los datos evidencian que no se cumplió con las expectativas, las pequeñas y microempresas de hasta 50 empleados entrarían en operaciones con el 100% de su plantilla de empleados, mientras que las empresas que superen los 50 trabajadores estarían autorizadas a disponer de hasta el 75% de su plantilla.

También, a partir de esta fase, el Gobierno previó que podrán realizarse servicios religiosos tres veces por semana, lo cual tampoco ocurrirá en caso de Medina así lo considere, tomando en cuenta el comportamiento de la positividad del virus difundido a través de los boletines del ministerio de Salud Pública.

La nueva recomendación de Comité de Gestión Sanitaria hecha hoy a Medina, impacta de manera directa en el mismo corazón de los planes de los sectores de la economía que desde ya hacían sus preparativos para reactivarse en la Fase 4, que se estimó para el 5 de julio, donde todas las empresas estarían en condiciones de reaundar sus labores con el 100% de su personal.

Además, en esta fase se contempló reactivar el turismo, abriéndose hoteles y aeropuertos, así como los gimnasios y los comedores de los restaurantes.

El pasado mes de mayo el Gobierno puso en marcha la Fase 1 de desescalada, en la cual las micro empresas (de hasta 10 empleados) se incorporaron con hasta 5 empleados o el 50% de su plantilla. Además, en las empresas pequeñas (de hasta 50 empleados) se permitió el 50% del personal y en las medianas y grandes hasta el 25% del total.

También, las barberías, salones de belleza y consultorios médicos, retomaron sus actividades.

Posteriormente, se avanzó en la Fase 2 en este mes de junio, donde lse dispuso que las microempresas puedan trabajar con el 100% de su personal.

De igual forma, se permitió que las pequeñas empresas puedan incorporar hasta el 75% de su personal, y las grandes y medianas con hasta el 50% del personal durante esta fase.