RD: un país en crisis de generatividad

RD: un país en crisis de generatividad

Las personas y los países que viven de forma responsable estructuran el desarrollo en el presente, pensado hacia el futuro. La planificación se hace de forma integral, horizontal, de cohesión y de inclusión sostenible para asegurar y garantizar el abastecimiento, el desarrollo, la sostenibilidad, el bienestar y la felicidad a los que vienen atrás.
Se habla de la escasez del agua en el futuro, de la ausencia de tierras cultivables para alimententar la población futura, del aumento del hambre, la desnutrición, los trastornos del desarrollo infantil y las carencias de vitaminas para lograr la inteligencia cognitiva. La ausencia de planificación en políticas Infanto-adolecentes, en educación integral, tecnológica, idiomas, salud mental, educación sexual, prevención de embarazo en adolescentes, valores, costumbres, hábitos saludables, serían las condicionantes de mayor riesgo para los adultos del futuro.
Los países que estructuran desarrollo sostenible para evitar “ciudadanía en déficit” que son los excluidos por género, marginalidad, pobreza y limitaciones psicosociales, son los que invierten en las regiones más apartadas, donde existen tercera y cuarta generación de familias que son pobres, o sea, los abuelos pobres, los padres pobres, los hijos pobres y los nietos entrarán al círculo de pobreza. Esa falta de inclusión social, de cohesión, de responsabilidad y de compromiso, es la que recibe el nombre de falta de generatividad, con los niños, adolescentes y jóvenes que son el futuro.
La no planificación para que las personas vivan mejor, con mayor esperanza de vida, mejor calidad y calidez en todos los órdenes habla de crisis de generatividad. El diseño del presupuesto, la inversión del PIB, el aumento del gasto en los sectores más desposeídos y más vulnerables, son formas de aplicaciones económicas que se invierten en el presente, para garantizar mayor movilidad social, mejorando así la autoestima, la dignidad y la condición de seres humanos que no eligieron ser pobres. La ausencia de generatividad, lleva a la falta de confianza básica, aumenta el sistema de creencia distorsionada y limitante, de comportamientos disfuncionales, y de resultados que no son favorables para las personas excluidas.
De todo esto se desprenden los daños colaterales que se reproducen impactando a las familias, las parejas, los jóvenes y los niños. Es de esa falta de visión generacional, es la que aumentan la delincuencia, la prostitución, el bandolerismo, la inseguridad ciudadana, pero también, la destructuracion familiar, cambiando la dinámica y la tipología: familias rotas, disfuncionales y reconstruidas. En la adultez se planifica la vejez ¿cómo quiero terminar? ¿Cómo quiero que me recuerden? En la medida que una persona asegura su desarrollo de forma equitativa, asegura su futuro y la de sus generaciones de forma responsable. El autoengaño, la irresponsabilidad, la ausencia de planificación predicen la llegada de una generatividad negativa, riesgosa, sufrible y en condiciones desfavorables. Los países que planifican, controlan el gasto, se endeudan poco, articulan políticas saludables y preventivas en seguridad social, con buenos retiros, son los que favorecen el bienestar social. Las empresas que Invierten en sus recursos humanos y les ayudan a gerencial de forma positiva, asertivay en la salud laboral, el retiro digno, la pensión digna, y las enseñanzas para aprenden a tener una adultez o vejez saludables, también apuestan a la generatividad. La diferencia se hace cuando se asume el presente y se planifica el futuro de forma colectiva y responsable. Así se defiende la generatividad.